El crédito será blando y con un interés menor del 4%

Los bancos españoles con problemas podrán optar a la financiación europea a través de un préstamo blando, de unos 15 años de duración, un periodo de gracia de entre 5 y 10 años y un tipo de interés de entre el 3 y el 4%, como ya adelantó LA RAZÓN. Así lo confirmó ayer en Luxemburgo el ministro de Economía, Luis de Guindos, tras la primera discusión en el seno del Ecofin sobre las condiciones del crédito de hasta 100.000 millones que la zona euro ha puesto a disposición del Gobierno español. «Son plazos largos, que van incluso más allá de los 15 años con periodos de gracia que están entre 5 y 10 y tipos de interés que están en torno al 3% y 4 %», manifestó. «Eso es lo que hay ahora y creo que sobre esos parámetros se moverá lo que es la definición de las características del préstamo», dijo.

El Gobierno enviará a la UE la solicitud formal de ayuda este lunes, pero en ella no aparecerá todavía la cuantía exacta solicitada, que se conocerá al final de la negociación. En principio, las entidades españolas necesitan un capital máximo adicional de entre 51.000 y 62.000 millones de euros, según el resultado de las auditorías independientes.

En este sentido, De Guindos se mostró molesto con la premura que le han insuflado algunos de sus colegas, y en especial el presidente del Eurogrupo, Jean Claude Juncker, para recibir la solicitud cuanto antes. «De vez en cuando al señor Juncker también hay que explicarle las cosas», aseveró, resaltando que, pese a la polémica estéril que se ha generado sobre el calendario, la petición es en sí sólo una «mera formalidad».

Lo realmente importante serán las especificaciones que se recojan en el memorando de entendimiento que se negociará a partir de ahora de cara a ser aprobado en la próxima reunión del Eurogrupo del 9 de julio, donde deben quedar fijadas las condiciones de entrega del dinero que la eurozona ofrece al Gobierno español para que recapitalice a las entidades en apuros, a priori, a través delFROB. En todo caso, la recapitalización directa de la banca, sin pasar por el Estado, sigue siendo una posibilidad abierta para España si los líderes europeos pactan esta posibilidad.

El memorándum incluirá, además de planes de reestructuración para las entidades que pidan ayuda, condiciones para el conjunto del sistema financiero, en particular un refuerzo de la supervisión y la transparencia en el sector.

Si España consiguiese unos intereses de entre el 3% y 4%, el Gobierno obtendría un retorno doble de la banca a cambio de la inyección de capital con bonos convertibles contingentes, los denominados «cocos». En el caso de que la ayuda a las entidades se haga llegar a través de la compra de «cocos», el Estado recibirá un interés fijo anual por esos instrumentos de capital hasta su desinversión. En este caso, el interés mínimo que ha aceptado la Comisión en casos anteriores ha sido 8,5%, explicó el comisario europeo de Competencia, Joaquín Almunia.

Las condiciones que tendrá la ayuda
- La banca podrá recibir hasta 100.000 millones de euros, pero sólo necesitará un máximo de 62.000 millones, según las dos auditoras independientes.
- El plazo para su devolución será de 15 años, aunque De Guindos aseguró que podría haber un periodo de gracia de entre 5 y 10 años.
- El tipo de interés oscilará entre el 3% y el 4%.
- Si finalmente es el FROB el que canaliza el dinero, el Estado podría conseguir un interés por el dinero que rondaría el 8%.

Merkel se niega otra vez a una inyección directa
- La polémica sobre la posibilidad de inyectar directamente la ayuda a la banca sin pasar por el FROB continúa. España ya no es la única que defiende esta opción y ha encontrado un poderoso aliado en el FMI, que considera que sería una buena opción para evitar el contagio de la deuda soberana. Pero Angela Merkel, canciller alemana, volvió a advertir ayer de que el responsable último de los 100.000 millones de euros será el Estado español.

La prima de riesgo cae 95 puntos en cuatro días
La prima de riesgo de España despidió ayer la semana por debajo de los 480 puntos básicos cuatro días después de alcanzar un máximo histórico de 575 puntos. Desde aquel nivel, alcanzado el lunes, el diferencial de nuestro país con Alemania se ha reducido un 16,5%, o 95 puntos básicos, gracias al recorte en el interés del bono español a diez años y al encarecimiento de la referencia germana a una década. En Bolsa, el Ibex 35 logró un repunte del 2,34% en las últimas cinco sesiones catapultado por el sector financiero, que ha copado las principales posiciones alcistas en el parqué nacional al calor de las ayudas de la UE.