El PNV «boicoteará» el adelanto electoral por temor a que Bildu entre en el Congreso

Ni siquiera los peores augurios de los nacionalistas vascos aventuraban ese desenlace electoral. De ahí que su cúpula esté aún digiriéndolo y su ejecutiva haya optado por tomarse su tiempo para diseñar la estrategia a seguir en Madrid y en Vitoria. Tras estos inesperados resultados, los dirigentes nacionalistas son conscientes de que deben medir con exactitud los pasos a dar para evitar que se les vuelva en contra su propia hoja de ruta a desarrollar en las legislaturas nacional y vasca. No ocultan –eso sí, en privado– su preocupación por el ascenso sin precedentes de la izquierda abertzale. Por eso harán lo posible por evitar, de momento, un adelanto electoral tanto de las generales como de las autonómicas vascas, previstas éstas últimas para 2013. De convocarse ahora ambas citas con las urnas, el aparato del partido teme que Bildu reproduzca su resultado de municipales. Los peneuvistas están convencidos de que la coalición les puede arrebatar escaños no sólo en el Congreso de los Diputados, sino también en la Cámara de Vitoria.

Que pase el tiempo
«Si te descuidas, la ola de Bildu te puede llevar por delante», asegura a este diario un destacado dirigente peneuvista, que achaca su subida como la espuma a la campaña realizada en Madrid en contra de su legalización. En este escenario poco halagüeño para sus intereses, el PNV apuesta por esperar a que el tiempo, «que todo lo cura», calme los ánimos exaltados de los votantes por el anhelo de lograr la «paz y la normalización» en Euskadi.
En unos meses, los nacionalistas vascos creen que Sortu sustituirá a Bildu, una vez que el Tribunal Constitucional le permita inscribirse en el Registro de Partidos del Ministerio del Interior. Este relevo, calculan, redefinirá los actuales espacios electorales dibujados el 22-M y rebajará los votos de la izquierda abertzale.

Por eso el PNV intentará ganar tiempo dando apoyos puntuales al Ejecutivo central. No obstante, evitará por todos los medios hablar de respaldo incondicional a José Luis Rodríguez Zapatero hasta el final de legislatura. Para ello, negociará su voto materia por materia. De hecho, ahora estudia su respaldo al decreto ley del Gobierno para reducir la economía sumergida. Aunque su estrategia dependerá de cómo evolucionen los acontecimientos en el resto de formaciones políticas, no desvelará hasta última hora si permitirá o no aprobar los Presupuestos Generales del Estado de 2012. No obstante, es consciente de que tanto el Ejecutivo de Zapatero como el de López están deslegitimados para gobernar después del varapalo recibido por las urnas. De ahí que se vea obligado a pedir, eso sí, con «la boca pequeña», el anticipo de generales y autonómicas. «Es más una cuestión de imagen. Con la que está cayendo, no se puede hacer otra cosa», lamenta a LA RAZÓN un destacado nacionalista vasco.

Reparto de papeles
En este contexto, Josu Erkoreka, portavoz del PNV en el Congreso, e Iñigo Urkullu, presidente del EBB, se repartieron ayer los papeles. Mientras, Erkoreka desde Madrid mantuvo un discurso más duro e incluso amagó con pedir a Zapatero que adelante las elecciones, Urkullu desde Bilbao optó por un tono más prudente y moderado y sólo se refirió a un anticipo de las autonómicas vascas. De momento, los nacionalistas reclaman al presidente del Gobierno central que cumpla el pacto alcanzado a cambio de su apoyo a las cuentas públicas de este año. Así se lo han trasladado en las últimas horas. De hecho, Zapatero podría haber mantenido una breve conversación telefónica con Urkullu, según confirmaron fuentes nacionalistas. En este contacto, ambos dirigentes, que se reunirán en breve, habrían realizado un análisis de emergencia del nuevo escenario político que se abre en España tras el 22-M y, concretamente, en el País Vasco tras el huracán Bildu.

CiU dice sí ahora al adelanto de elecciones
El portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran Lleida, alertó ayer de una posible mayoría absoluta del PP en 2012 y evitó aclarar si apoyaría o no una eventual moción de censura contra Rodríguez Zapatero. Tras la reunión de la comisión ejecutiva nacional de CiU, Duran destacó el «desastre» electoral sufrido por el PSOE, que confirma el «cambio de ciclo político. Sobre la posibilidad de elecciones generales anticipadas, se mostró escéptico, ya que no ve al presidente del Gobierno «con ganas» para ello, ni tampoco al PP dispuesto a plantear una moción de censura. Recordó que CiU ya pidió a finales de 2010 adelantar los comicios. Si meses atrás rechazaba una moción de censura del PP, esta vez Duran evitó pronunciarse al respecto, porque habría que analizarlo con calma si se acaba finalmente planteando.