OPINIÓN: La causa profunda del paro masivo

Somos muchos los que venimos afirmando desde hace mucho tiempo que las gravísimas anomalías estructurales del mercado de trabajo en España son la auténtica causa profunda de por qué nuestra tasa de paro supera de nuevo el 20%, mientras que en Austria y en Dinamarca la tasa es apenas es del 4%, en Alemania del 7%, en Italia del 8% y en Francia del 9%.

Sin embargo, el socialismo político, mediático y académico ha venido achacando el problema diferencial del paro español a la crisis financiera internacional, primero, al sector de la construcción, después, e incluso al cambio climático, si ha hecho falta. Cuando la evidencia se ha impuesto, ese mismo socialismo ha promovido una reforma laboral que, al haber eludido aspectos fundamentales del mal funcionamiento de nuestro mercado de trabajo, no va a resolver el problema del paro masivo, por mucho que Zapatero haya intentado convencer de lo contrario en Oslo.

España va a seguir teniendo un modelo franquista de relaciones laborales, con un sistema de negociación colectiva obsoleto y pernicioso, que sólo sirve a los intereses de los aparatos de sindicatos y patronal. La prestación por desempleo va a seguir diseñada defectuosamente, sin incentivos adecuados a la búsqueda inmediata de empleo. La intermediación laboral no va a quedar completamente liberalizada. Los costes fiscales del empleo no van a ser rebajados. Las políticas activas de empleo y la formación profesional van a seguir siendo instrumentos burocratizados y estatizados. La legislación sobre el despido va a seguir siendo fuente de inseguridad jurídica. El salario mínimo va a seguir penalizando a los trabajadores sin cualificación alguna. El absentismo laboral permanecerá por encima de la media europea. Y el sistema educativo va a seguir expulsando a 1 de cada 3 jóvenes sin la cualificación mínima imprescindible. Así no se arregla el problema del paro.