Alicante
Casi la mitad de los valencianos que votó lo hizo al PP
Los que no crean que las votaciones son el mayor ejercicio de democracia real que se puede hacer, que se lo pregunten a un anciano de 88 años que ayer acudió a su colegio electoral en la calle Claret de Valencia a las 7.45 horas y comenzó a sentirse indispuestos.
Los miembros de la mesa electoral temieron que se tratara de un infarto por lo que requirieron la presencia de una ambulancia. Pero el hombre dijo que él no se marchaba de allí sin ejercer su derecho a voto. Así que, cuando se ha abierto el colegio electoral, el presidente de la mesa ha salido para recoger el voto del anciano, y éste ha podido ser trasladado finalmente en una ambulancia hasta el Hospital Clínico de Valencia. Al final el susto se ha quedado en solo eso, un susto, y el centro médico informó de que el anciano había sufrido un episodio de mareos.
Y mareo también sufrieron ayer los distintos candidatos del PSPV en prácticamente todas las demarcaciones electorales. Ninguna lista socialista dejó de sufrir el descenso electoral que, en la mayoría de las ocasiones se achacó a la situación económica y al voto de castigo nacional. Por lo demás, la jornada electoral en la Comunitat Valencia discurrió con normalidad y sin apenas incidentes.
Otra de las protagonistas de la jornada fue la presidenta de una de las mesas de un colegio electoral de San Vicente del Raspeig (Alicante) que lució una camiseta con el lema de «Democracia real ya», sin que ninguna de las partes impugnara la situación. De hecho, la camiseta muestra más bien su rechazo a los partidos políticos en general, pero sin especificar ninguno de ellos. Según la Subdelegación del Gobierno en Alicante, «esta mujer preside con normalidad una de las mesas con la citada indumentaria, puesto que «nadie ha protestado o impugnado». Por otra parte, en el municipio de Mutxamel varios interventores del PP fueron obligados a cambiarse de camiseta por llegar al colegio electoral con unas con el logotipo de los populares. Esta situación también ocurrió a primera hora en cuatro colegios de l'Alfàs del Pi, aunque en este caso con apoderados del PSPV-PSOE que llevaban camisetas con las iniciales V.A., en alusión al candidato socialista, Vicente Arques.
Por su parte y en el apartado de incidencias, el candidato de Compromís a la Presidencia de la Generalitat, Enric Morera, denunciado un intento de «silenciar y acallar la voz de Compromís», porque en ocho colegios electorales «no había papeletas» de esta formación, uno de ellos el del presidente de la Generalitat, Francisco Camps. Morera no fue de los más madrugadores ya que acudió a votar a las doce del mediodía y hubo de volver porque había olvidado su DNI. Más madrugaron el presidente Camps y su principal rival, Jorge Alarte. El titular del Ejecutivo acudió a votar poco antes de las diez de la mañana en el Instituto Luis Vives, acompañado de su mujer y sus tres hijos. «Estoy orgulloso del nivel de madurez y de responsabilidad de los ciudadanos de la Comunitat Valenciana a lo largo de toda esta campaña y precampaña electoral» y destacó que una vez más se ha demostrado que son «personas con una responsabilidad y un compromiso impresionante para nuestro presente y nuestro futuro».
Sobre la misma hora hacía lo propio el candidato del PSPV a al Presidencia de la Generalitat, Jorge Alarte, en el colegio González Gallarza de Alaquás, donde acudió junto a la alcaldesa de la localidad y candidata a al reelección por el PSPV, Elvira García.Al entrar al aula donde estaban las urnas saludó a su madre, María, que actúa como interventora, y a su padre y hermanos, apoderados. Manifestó que «los valencianos tenemos hoy la capacidad de decidir nuestro futuro, de no ser indiferentes y de participar cada uno en la forma, manera y opción que considere». Por su parte, la alcaldesa de Valencia y candidata a la reelección, Rita Barberá (PP), animó a los valencianos a votar «de forma masiva» porque, «la Democracia está en las urnas». Barberá acudió a votar pasadas las doce del mediodía a la Oficina de Información y Defensa del Consumidor del Parterre, ataviada con su clásico traje de chaqueta rojo, y con el brazo en cabestrillo debido a un fuerte apretón de manos que recibió de un militante en el mitin del PP en la Plaza de Toros. La alcaldesa de Alicante y candidata del PP a la reelección, Sonia Castedo, dijo ayer que «la abstención en estos momentos no es una opción» porque «necesitamos que la gente venga a votar si realmente quiere que exista un cambio» en las próximas elecciones generales de marzo de 2012. Castedo ha hecho estas declaraciones a los periodistas tras ejercer su derecho al voto, acompañado de su marido y su hija, en el colegio electoral de El Faro, en la playa de San Juan. El alcalde de Castellón y candidato a la reelección, Alberto Fabra (PP), invitó a los ciudadanos a participar en «la fiesta de la democracia» y aseguró que las personas «tienen derecho a ejercer la democracia real hoy votando».
El descontento con el PSOE vira a la izquierda
Los grandes beneficiados del descontento generalizado con el PSPV no fue solamente el PP, sino muy especialmente los partidos a su izquierda, concretamente el Compromís y Esquerra Unida. Pese a los pronósticos que colocaban a ambos ante el abismo de no llegar al cinco por ciento, los pronósticos indicaban que ambos estarían en Les Corts en proporción similar a la que estuvieron en 2007 cuando se presentaron agrupados. Sin embargo, los vecinos de Almudaina, pequeño pueblo del interior de la provincia de Alicante, han reelegido hoy con el 64,29 por ciento de los votos como alcalde a José Luis Seguí (PP), que lleva 39 años ininterrumpidos desde que, en 1972, llegara al cargo en plena dictadura de Franco.Cuando se han escrutado el cien por cien de los votos, Seguí ha obtenido 45 sufragios, por 7 del PSPV-PSOE y 4 del Bloc.
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