El caso es ganar

No es este un Atlético entusiasmante, pero al menos en la noche del sábado fue eficaz. Al partido le sobraron casi cuarenta y cinco minutos en los que los rojiblancos sestearon ante la falta de pulso del Deportivo. Sólo los destellos geniales del Kun y la tenacidad de Reyes dieron la chispa a un encuentro que terminó siendo soporífero. Afortunadamente los de Lotina vinieron al Calderón con una pájara de impresión, y en ningún momento dieron la sensación de que podían hacerse con el partido.

De Gea, que lleva una temporada con la cabeza llena de pájaros, o de cantos de sirena, ni se estrenó y Forlán tiró un penalti como de patio de colegio aunque después la falta que paró Aranzubía fue de auténtico maestro. Eso es el uruguayo, un maestro que parece no saber donde ha dejado los apuntes.Ya los encontrará, digo yo, porque con los dos pies fuera de la competición europea hay que centrarse en la Liga y en la Copa del Rey para salvar la temporada, y para eso hace falta que Forlán vuelva por donde solía.

El caso es que se ganó para romper la racha de fracasos de las últimas semanas, y sumando puntos, aunque la afición termine bostezando, es como se llega a los puestos de Champions. Para ello hay que ser regular en el sentido de constante, que regular, en el otro sentido, ya lo es este Atlético de sobra. Y no será por falta de calidad de sus jugadores, que tiene de sobra, pero la tendencia al desbarajuste en la líneas es lo que Quique tiene que corregir lo antes posible.