Mario Gas deja el Teatro Español tras su polémica renovación

MADRID- Finalmente, Mario Gas deja el consistorio madrileño. Tras la polémica por su renovación de última hora y por la irregularidad de dicha prórroga contractual, el director del Teatro Español se desvincula de Madrid, Arte y Cultura (MACSA) la empresa municipal que gestiona los espacios culturales de la capital. Aunque el Ayuntamiento no confirmó nada al respecto, fuentes del Teatro Español aseguraron que el director y el Área de las Artes están llegando a un acuerdo sobre las condiciones de la marcha de Gas, ya decidida aunque sin fecha definitiva. Posiblemente se hará pública la salida del director teatral la semana que viene, así como los detalles de la rescisión de su contrato.

El elección de Gas para que tomase las riendas del Español fue una decisión personal de la entonces delegada de Las Artes, Alicia Moreno, que siempre estuvo rodeada de polémica. Para empezar porque el sueldo del nuevo director prácticamente duplicaba el de su predecesor. También se cuestionó su decisión de programar una discutida obra de Pepe Rubianes y la de una exposición en las pasadas navidades que incluía una foto calificada por algunos como ofensiva.

Pero ha sido una decisión política la que ha puesto contra las cuerdas al director del Español. El pasado 16 de diciembre, Alicia Moreno autorizó la prórroga de seis contratos de alta dirección en MACSA, entre ellos el de Gas y dos colaboradores suyos en el teatro. Apenas tres días después, Alberto Ruiz-Gallardón era designado ministro de Justicia y, una semana más tarde, Moreno se desvinculaba del Ayuntamiento de Madrid puesto que su trabajo político estaba ligado a la figura del ex alcalde.

Irregularidades
Cuando el nuevo delegado de Las Artes, Fernando Villalonga, tomó posesión descubrió que dichas prórrogas tenían una serie de irregularidades que, la Asesoría Jurídica del Ayuntamiento investigó. En concreto no habían pasado por el trámite preceptivo de informarse a la Dirección de Presupuesto, se había sobrepasado el límite de gasto que podía autorizar la consejera delegada de MACSA (que firmó las prórrogas) y, en el caso del salario de Mario Gas, superaba la remuneración máxima establecida para los empleados públicos del consistorio madrileño.

Pese a que Villalonga aseguró que «respetaría dichos contratos», lo cierto es que optó por crear un nuevo puesto para dirigir los espacios escénicos de la capital. El pasado miércoles, el ex director del Centro Niemeyer, Natalio Grueso, tomó posesión como director de Programación de Artes Escénicas.