Tres infiltrados talibanes hieren a un teniente español

MADRID- En pleno relevo del contingente entre la saliente Brigada Paracaidista (Bripac) y la Brigada Ligera Aerotransportable (Brilat), ésta ha recibido su primer herido en apenas unos días de estancia en Afganistán. El ataque de ayer tiene una de las características que más preocupan a los mandos aliados, y por ende españoles, en el tramo final de la misión de la OTAN en el país asiático: infiltrados talibanes en las filas del Ejército afgano. Ayer, tres hombres vestidos de soldado local irrumpieron en la base militar afgana contigua al puesto avanzado español de Moqur.

Según la nota remitida por el Ministerio de Defensa, los hechos ocurrieron sobre las 10 y cuarto de la mañana (hora local) cuando los hombres, «presuntamente pertenecientes a una unidad regular del Ejército Nacional Afgano», comenzaron a abrir fuego contra los militares españoles que vigilaban el acceso a la base. Tras el ataque, los tres salieron corriendo y lanzando granadas de mano para proteger su huida. En su carrera pasaron por delante de la base española y dispararon al cuerpo de guardia, que respondió con fuego de fusil. La respuesta española alcanzó a uno de los tres atacantes, que resultó herido muy grave, mientras otro era arrestado y el tercero lograba huir. En esos primeros instantes, un teniente instructor resultó herido en el brazo izquierdo por el impacto de un trozo de metralla de una de las granadas lanzadas por los agresores. Inmediatamente fue evacuado al puesto avanzado contiguo para ser atendido en la célula de estabilización y posteriormente fue llevado al hospital de la base de Qala-i-Now, sede del grueso del contingente, donde se encuentra fuera de peligro y de buen humor.

La versión ofrecida ayer por el Gobierno afgano difiere sobre lo aportado por el Ministerio de Defensa y la coalición internacional. Según informó a Efe una fuente de la Administración afgana, el uniformado del Ejército afgano que atacó a las tropas españolas «salió del cuartel del distrito de Moqur y abrió fuego contra los soldados de la ISAF» que se encontraban allí en misión de formación.

Esa misma fuente incluso identificó al atacante como Hashmatulá, hijo de Mohamad Taliba, y dijo que era originario de la provincia norteña de Panjshir, una región tradicionalmente ajena a la influencia talibán.

Es la segunda vez que un infiltrado ataca a los instructores españoles. La anterior, en agosto de 2010, acabó con la muerte de dos guardias civiles.