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Quique adiós con ira

El Atlético jugará en Europa la próxima temporada y su actual entrenador, Quique, puede que se siente en el banquillo del Tottenham o el Aston Villa, con los que ya ha tenido contactos. Quique Sánchez Flores no pasará a la historia del club por su diplomacia.

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El final de su vida en rojiblanco ha estado presidido por su mala relación con Forlán, que culminó ayer con la no inclusión del uruguayo entre los convocados. Después de un entrenamiento matutino, Quique confirmó la ausencia del delantero, en el más difícil todavía de su relación con un jugador que ha marcado muchos goles para el Atlético. Por eso, en el Calderón hubo gritos de «uruguayo, uruguayo», aunque desde el fondo sur también se apoyó al técnico.

Fue el adiós con ira de Quique en un partido en el que el Atlético no lo pasó muy bien ante un rival ya descendido. Y eso que a los dos minutos Domínguez hizo gol. Dominaba el Atlético, pero Pulido, canterano que debutaba en el Calderón, cometió penalti. La pena máxima la lanzó Trezeguet y De Gea –¿en su despedida?– desvió el disparo del delantero galo. Las acciones de Juanfran, uno de los más destacados, no encontaron rematador. En cambio, Trezeguet enmendó su yerro con el tanto del empate mediada la segunda parte. Reyes lo arregló desde fuera del área.

El Sevilla solventó su compromiso con la Real Sociedad con dos goles de Kanouté, que encarrilaron el partido al comienzo de la segunda parte ante una Real muy defensiva. Aguirrechu acortó distancias y Negredo firmó la victoria. Los sevillistas sellan su participación europea.
El Athletic lo pasó muy mal en San Mamés ante el Málaga. Los de Caparrós vieron como el Málaga se adelantaba en el marcador con un tanto de Recio. Al descanso todo pintaba mal para el Athletic Club, pero en la reanudación cambió el panorama. Penalti a Llorente, fallo de David López, pero en el rechace hubo mano de Baptista y nuebo penalti que el propio David López no falló. Con el empate, respiró San Mamés.