La Región está preparada para reciclar 50 millones de toneladas de residuos

Potenciar la recogida selectiva de residuos orgánicos reciclados, especialmente por parte de los grandes productores; facilitar su venta en el mercado con la suficiente calidad y combatiendo su uso fraudulento; y apostar aún más por la investigación. Éstos son, grosso modo, algunos de los desafíos a los que se enfrenta la Junta a corto o medio plazo en materia de gestión de residuos orgánicos.

Pese a ello, Castilla y León está preparada en estos momentos para reciclar cincuenta millones de toneladas de residuos orgánicos reciclados. Los doce centros de tratamiento de basura, las 53 plantas de transferencia, los 110 puntos limpios, y los cinco millones de hectáreas existentes a lo largo y ancho de las nueve provincias de nuestra Comunidad, así lo atestiguan.

Datos relevantes, que ponía de relieve la vicepresidenta primera y consejera de Medio Ambiente, María Jesús Ruiz, ayer en Valladolid, tras inaugurar un Congreso Internacional sobre suelos y materia orgánica, que organiza la Consejería de Medio Ambiente junto con el Instituto para la Sostenibilidad de los Recursos, y en el que están participando más de doscientos especialistas procedentes de todo el mundo. «El potencial de Castilla y León en esta materia es enorme», destacaba María Jesús Ruiz, tras destacar que los estudios que la Junta está llevando a cabo en colaboración con las Universidades de Valladolid, Burgos y Salamanca relacionados con el aporte de la materia orgánica al suelo supondrán un antes y un después en la gestión de residuos orgánicos reciclados.

Estas investigaciones tratan de determinar los efectos de la utilización del ‘compost' o abono orgánico parecido al estiércol, así como de los lodos de depuradora, en los cultivos y en el agua. También medirán la transformación en abono o en metano de la contaminación proveniente de la descomposición de los residuos.

Al respecto, la vicepresidenta recordaba que en Castilla y León hay ya en funcionamiento cuatro plantas que se encargan de transformar en metano los residuos orgánicos que reciben, y que el pasado año generaron más de seis millones de kilovatios por hora.

Respecto a la directiva europea, Ruiz insistía en que Castilla y León, a través de su Plan de Residuos Compostables, está en el buen camino para lograr en 2020 los objetivos marcados en la reutilización, reciclaje y compostaje.