Crece la alerta internacional ante la «guerra de divisas»

MADRID- Los primeros espadas de los organismos económicos internacionales unieron ayer sus voces para alertar sobre los problemas de la que ya todo el mundo denomina como la «guerra de las divisas». Jean-Claude Trichet, del Banco Central Europeo (BCE), Dominique Strauss-Kahn, del Fondo Monetario Internacional (FMI), y Robert Zoellick, del Banco Mundial (BM), se sumaron a la presión internacional iniciada por EE UU contra aquellos países que mantienen artificialmente el valor de sus monedas para favorecer así sus exportaciones.
Los tres coincidieron en señalar que la volatilidad en el mercado y el sostenimiento artificial del valor de las monedas en el mercado tiene implicaciones negativas para la estabilidad financiera global. Además, aunque sin mencionarlo expresamente, denunciaron la operación que está efectuando China, que impide la apreciación del yuan, y señalaron del peligro de que esta medida provoque un efecto llamada en algunas de las grandes economías emergentes.
Los tipos no se mueven
Trichet, que anunció que el BCE mantendrá su política monetaria y dejará los tipos en el 1%, denunció que «la excesiva volatilidad y los movimientos desordenados conllevan implicaciones negativas para la estabilidad económica y financiera». Además, el dirigente francés aseguró que «un dólar fuerte va en interés de EE UU». «El tipo de cambio debería reflejar los fundamentales económicos», añadio el presidente del principal organismo monetario de la UE.
El BCE mantiene su intención de retirar progresivamente las medidas no convencionales aplicadas en la crisis financiera, a diferencia de lo que ha hecho el Banco de Japón y se prevé que haga la Reserva Federal estadounidense (Fed).
El portavoz de Asuntos Económicos y Monetarios de la Comisión Europea (CE), Amadeu Altafaj, también habló ayer del asunto de las divisas y apuntó expresamente a China, al afirmar que «hay un amplio consenso acerca de que la divisa china está infravalorada», motivo por el cual laUE exigió al país que permitiera una mayor flotación de su moneda.
 El primer ministro chino, Wen Jiabao, se defendió ayer de las presiones para apreciar el yuan asegurando que podría causar una crisis en China y un «desastre» para la economía mundial.
Strauss-Kahn fue más allá al señalar que «sería justo decir que muchos consideran la divisa como un arma y eso ciertamente no es bueno para la economía global», en clara referencia a China. Además, se alineó con EE UU y la UE al pedir la apreciación del yuan, y consideró el FMI como el foro adecuado para discutir la situación actual de los tipos de cambio de las distintas monedas internacionales.
Zoellick, por su parte, añadió que algunos países «están interviniendo para reducir el valor de sus divisas y respaldar sus exportaciones», lo que causa «tensiones».

El euro logra superar el nivel de 1,4 dólares
- Las palabras de Jean-Claude Trichet sobre los peligros de la fortaleza del euro para la recuperación económica de la UE no lograron el efecto deseado en los mercados de divisas, sino justo el contrario. La moneda comunitaria llegó a superar durante la sesión el nivel de 1,40 dólares, perdido hace ocho meses, aunque luego se estabilizó en el entorno de 1,39 «billetes verdes». Esta racha alcista amenaza con perjudicar aún más las exportaciones del Viejo Continente.