Alarte al hoyo

Da igual desde dónde se mire. La paliza ha sido descomunal. A quince puntos de distancia del PPCV. Como para hacérselo mirar. El PSPV de Jorge Alarte continúa por la vereda del PSPV de Joan Ignasi Pla. Ha sido tal el batacazo y es tal la perspectiva, que no es tan descabellado plantearse la dimisión. Más aún si fuera consecuente con sus palabras «eres dueño de tus silencios y esclavo de tus palabras». No exagero. Me remito a la hemeroteca ¡qué traidora es!. Fue Alarte, no yo, quien se comprometió a irse en 2011 si no suma votos. Va camino de ello, por lo que podría favorecer a su partido dejándolo ya en lugar de esperar a las autonómicas. Ha bajado en votos y en porcentaje. Por si no le fuera suficiente, ha perdido en Alaquàs, el pueblo del que es alcalde, en donde el PSPV ha menguado en votos y el PP los ha aumentado. No cabe, por tanto, echar la culpa a la abstención. La responsabilidad, allí, es toda suya.
Además, Alarte debe recordar qué proponía cuando Pla perdía en su pueblo, Atzeneta. Que se fuera. Y no era alcalde.
Como colofón, su frase «hay sólo razones para trabajar duro. No hay momento ni tiempo para la autocomplacencia. No hay momento ni tiempo para la depresión». ¡Y que lo diga!. Aunque para lo segundo, tiene más que de sobra.
Mañana hablaré del PPCV.