Sevilla

Arenas asegura que la «deuda histórica» es «absolutamente ridícula y no se incorpora a la financiación del futuro»

El presidente del Partido Popular andaluz (PP-A), Javier Arenas, aseguró hoy que la cifra anunciada por el presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, para la ‘deuda histórica' es "absolutamente ridícula y no se incorpora a la financiación autonómica del futuro". Según indicó Arenas en declaraciones a Europa Press, hace diez días el nacionalismo catalán recibió "bajo cuerdas 800 millones de euros sin tener ningún compromiso estatutario, cifra que viene a confirmar la frustración de la ‘deuda histórica' que está reconocida desde el año 1982 en una ley orgánica". De este modo, el líder de los ‘populares' andaluces dijo que teme que "esta cantidad ridícula sirva para paliar que Andalucía no va a ser la región que más financiación obtenga del nuevo sistema, y esto es gravísimo porque somos la región más poblada y porque nuestro Estatuto desciende del criterio principal de población". Más aún, según indicó Arenas, cuando la comunidad autónoma está en la frontera del millón de parados y Chaves, "por razones de partido, esta aceptando una política financiera del Estado contra los intereses de los andaluces y que premia a las comunidades ricas y desarrolladas frente a las que todavía tenemos pendiente el desarrollo". En cuanto a la fecha, el presidente del PP-A dijo que el 20 de marzo "no supone ninguna confianza, ya que la fecha del Estatuto está incumplida desde hace seis meses, luego vamos a cobrar un talón ridículo de deuda, dándose además un incumplimiento de fechas establecidas". Por su parte, Chaves anunció hoy en una entrevista concedida a Europa Press, que el cumplimiento de la Disposición Adicional Segunda del Estatuto de Autonomía de Andalucía, denominada ‘deuda histórica', se cerrará en torno a los 1.200 millones de euros y quedará firmado antes del 20 de marzo, fecha fijada por la Comisión Bilateral de Cooperación Junta de Andalucía-Estado el pasado 18 de septiembre de 2008 después no haber podido cerrar un acuerdo y otorgarse un nuevo plazo de seis meses.