El viaje secreto de los catadores

Son las seis de la mañana y el equipo de cata de la Guía Repsol de los Mejores Vinos, dirigido por la enóloga María Isabel Mijares y organizado por la Academia Española de Gastronomía, emprende viaje hacia La Rioja rumbo a la bodega Pagos del Rey, propiedad de Félix Solís y situada en Fuenmayor, que cuenta con instalaciones también en Denominaciones de Origen Rueda, Ribera del Duero y Toro, lo que le convierte en el mayor productor de Castilla La Mancha.

La enóloga y su equipo valoraron, entre otros, el Albali Arium Gran Reserva 2002 y el Analivia Rueda 2008, dos etiquetas que lograron la Medalla de Oro Premium en el prestigioso concurso alemán Berliner Wine Trophy, un certamen que también reconoció a Altos de Tamarón Joven 2007, Blume Verdejo 2008, Ovación Bajoz 2008 y Caño Cosecha 2006.

Libre de publicidad

«Conozco bien los caldos de Félix Solís Avantis, pero me ha sorprendido cómo han mejorado los riberas, se están adaptando a su estilo, ya que al inaugurar una bodega al principio es difícil. Hemos catado vinos espectaculares, de ahí que éste sea un ejemplo de cómo una empresa tan grande se adapta a las diferentes zonas y es capaz de realizar caldos fieles a las mismas. Eso es lo importante, porque existe una cultura y a la gente le gusta probar diferentes etiquetas», señala Mijares. En cuanto a la puntuación, cuenta que «los miembros del panel ponen cada uno su nota después de realizar el tratamiento estadístico obligado desde el punto de vista sensorial. Después, esta calificación se complementa con la opinión de sumilleres, periodistas y compradores, un detalle fundamental, ya que hacemos vino con mucho cariño, pero hay que venderlo. Tenemos en cuenta qué tipo de precios estamos catando, ya que no exiges lo mismo a un vino de 20 euros que a uno de 40». Y añade que en 2010 se editarán 500.000 ejemplares de esta guía libre de publicidad, «de ahí nuestra total libertad a la hora de emitir juicios».

 El 90 por ciento de los consumidores bebe durante las comidas, de ahí que los enólogos aúnen sus esfuerzos por realizar etiquetas que acompañen y realcen nuestra dieta mediterránea. Una tendencia hacia la que camina la labor de los enólogos. Cariñena, Montsant, Ribeira Sacra, Costers del Segre y Pazo de Monterrey son algunas D.O. poco conocidas que Mijares nos invita a descubrir: «Tenemos un país que es un lujo y el consumo del vino baja cada día», recuerda. Félix Solís pide a los hosteleros que sean más benevolentes y pongan en las cartas de los restaurantes precios más asequibles: «Por ejemplo, nuestro Castilla Albai cuesta 5,5 euros. No por ser más caros los vinos son mejores. Por otra parte, debemos hacer nuestra la moda del consumo de vino por copas. Si te bebes dos y comes bien no das positivo, y es una forma de atraer a los jóvenes y asegurar el desarrollo del sector», explica el bodeguero.