Endosar el mochuelo

Es razonable llevarse bien con Obama, pero no a cualquier precio. Si la petición que nos hace de acoger presos de Guantánamo hubiera partido de Bush, mucho me temo que la respuesta habría sido negativa. Por el simple hecho de que esa misma propuesta la formule Obama no hay que decirle «sí» sin más, pues habrá que analizar determinados aspectos que, desde luego, no son menores. Por ejemplo: en calidad de qué acogemos a esos reclusos. ¿Vendrán como presos en libertad vigilada? Si es así, ¿por qué se va a vigilar a alguien que no es acusado de nada? ¿Estarán en pisos, en pensiones o en hoteles? ¿Quién pagará los costes?Se cree que no son terroristas islamistas, pero ¿y si lo fueran? Item más: si en España no hay cargos contra ellos, ¿por qué razón los vamos a retener impidiendo que regresen a sus países? Cosa diferente es si hubiera cargos o se les acusara de algo. Pero acogerlos sólo porque a Washington le parece, no lo veo.Entiendo que Zapatero quiera redimir sus antiguos pecados anti-norteamericanos. Pero ese deseo no debe llevarle del «no a todo» al «sí a todo». Obama tiene un problema con Guantánamo. Se comprometió en campaña a cerrar la prisión y ahora se ve en la necesidad de hacerlo. La cuestión es que no sabe cómo. Creo que es más razonable que asuma personalmente el riesgo de liberarlos que endosarnos a nosotros el mochuelo.