Libros de Ciudadanía bajo sospecha

La lucha de los padres objetores de Educación para la Ciudadanía continúa su curso. Con la sentencia del Tribunal Supremo, en la que se insta a la neutralidad de los contenidos, se abren nuevas vías de actuación para los padres objetores. El epicentro de la contienda se fija ahora en las editorales, en el propio Ministerio de Educación y en sus propuestas de material didáctico. Así lo confirmaron las organizaciones de objetores durante el II Encuentro Nacional de Objetores de Educación para la Cuidadanía. Esta jornada, organizada por Profesionales por la Ética y la Conferencia Española de Centros de Enseñanza reunió, según los convocantes, a más de 1.000 personas procedentes de toda España en la Universidad Francisco de Vitoria, en Pozuelo (Madrid). «Seguiremos con nuestra reivindicación del derecho a la objeción, los 1.800 procedimientos judiciales y los cuatro recursos al tribunal Constitucional. Pero, además, denunciaremos todo el material didáctico que invada la conciencia del alumno», aseguró Jaime Urcelay, presidente de Profesionales por la Ética. Son varias las editoriales que ya han sido estudiadas, entre las que se encuentran Akal, Octoedro, Laberinto y McGraw Hill. «Aún no hemos terminado de estudiar todos los casos desde la asesoría jurídica, pero en cuanto terminemos con la investigación, realizaremos las medidas necesarias para interponer una nueva denuncia ante los tribunales», confirmó Urcelay. El estudio sobre la adecuación a la legalidad de los textos se realiza, de acuerdo a Profesionales por la Ética, sobre aquellas materias en las que no hay un consenso, tales como el derecho a la vida, el aborto, la eutanasia, los modelos familiares existentes o la identidad personal. Según esta misma federación, no es la primera vez que se produce una denuncia contra las editoriales. Es el caso del objetor de Andalucía afectado por la sentencia del tribunal Supremo: su abogado ha interpuesto una demanda a la editorial McGrawHill, en la que ha pedido medidas cautelares. Con respecto a los contenidos del Ministerio de Educación, las organizaciones de objetores denuncian que el material didáctico recomendado, un portal multimedia llamdo Axial, no responde a la neutralidad exigida por la sentencia. Esta web, señalan, está organizada en unidades didácticas, tales como la variedad sexual, que aborda cuestiones como el Día del Orgullo Gay y en la que se asegura que «tu media naranja puede ser masculina, femenina o mitá y mitá». «Nos encontramos ante un caso de incumplimiento flagrante de la sentencia del Tribunal Supremo», aseguró Urcelay. «Esta conflictividad judicial sólo se puede solucionar con diálogo y negociación con el Ministerio, tal y como venimos pidiendo desde hace tiempo. Sólo queremos una EpC que siga las directrices europeas y no viole los derechos de las personas», añadió.