Alberto Ruiz-Gallardón
Los «policías» de la basura
La próxima semana 300 agentes de Medio Ambiente vigilarán los 300.000 contenedores de Madrid. No separar los residuos de manera correcta puede costar a los vecinos hasta 750 euros
madrid- Estamos acostumbrados a verlo en CSI y en los últimos días también por el tristemente célebre caso de la joven Marta del Castillo. A partir de la semana que viene unos agentes vigilarán los cubos de la basura de los vecinos del Ayuntamiento de Madrid y, lejos de buscar pistas para resolver un crimen, se encargarán de velar para que los madrileños reciclen bien sus desperdicios. La nueva Ordenanza de Limpieza de los Espacios Públicos y de Gestión de Residuos se aprobó en el pleno del pasado 27 de febrero y entrará en vigor la semana que viene, fecha en que está previsto que se publique en los boletines oficiales del Ayuntamiento de Madrid y la Comunidad (BOAM y BOCAM). A partir de entonces, que los «policías» de la basura del Consistorio dirigido por Alberto Ruiz-Gallardón encuentren un recipiente de plástico en el cubo gris de tapa naranja (de residuos orgánicos) puede acarrear a su comunidad de vecinos una multa leve de hasta 750 euros. Además, en los casos en los que se pueda localizar al infractor, mediante la localización de correspondencia, por ejemplo, se expedirá la multa a título personal. Todo sea por favorecer el reciclaje. La ciudad de Madrid genera 4.600 toneladas de desperdicios cada día y fuentes del área de Medio Ambiente señalaron a LA RAZÓN que 300 agentes medioambientales de residuos (ARMAS) se encargarán de husmear en los 300.000 cubos de basura orgánica y plásticos –los amarillos– de los edificios de Madrid. Durante estos registros levantarán acta cuando comprueben que la separación de residuos no se ajusta a la norma. Desde el Ayuntamiento niegan que tras esta nueva norma exista un afán recaudatorio y reiteran que en las primeras visitas a las comunidades que no cumplan esta ordenanza sólo se enviará una nota informativa del sistema para separar las basuras adecuadamente. No pasarán menos de dos meses hasta que se empiecen a recibir las primeras multas.¿Cuánto tendré que pagar?El máximo que habrá que pagar si de forma reiterada estos agentes localizan residuos en el contenedor equivocado será de 750 euros. La graduación de estas sanciones no sigue criterios tan estrictos como, por ejemplo, las de tráfico y está establecida en el artículo 90 de la norma. Así, el texto informa de que para determinar la cuantía de la sanción «se atenderá a las circunstancias concurrentes en los hechos que la motivaron, tales como naturaleza de la infracción, perjuicio causado, reiteración, grado de intencionalidad así como aquellas circunstancias del responsable que puedan considerarse como atenuantes o agravantes». Lo que es lo mismo, no pagarán lo mismo las comunidades de vecinos que incumplan la norma la primera vez que aquellos que no corrijan su conducta una vez avisados.Hasta ahora, estos agentes medioambientales se limitaban a vigilar que las bolsas de basura se bajasen a los cubos a las horas fijadas y que los contenedores se encontrasen en buen estado, a partir de la entrada en vigor de la Ordenanza sumarán la vigilancia de la separación de residuos a estas competencias. Sólo ellos podrán meter las narices en la basura porque en la misma norma se establecen multas de la misma cuantía –de 0 a 750 euros– a aquellos ciudadanos que rebusquen y extraigan cosas de los contenedores porque la ordenanza considera que estas actividades dificultan la recogida de los residuos. Esto supone un punto y final para aquellos madrileños que ahogados por la crisis rescatan alimentos en buen estado de los contenedores de los supermercados. Otra de las prohibiciones en materia de limpieza se dirige a abandonar o depositar la basura en espacios públicos, cometer acciones vandálicas contra contenedores y papeleras, reparar vehículos en la vía pública, arrojar residuos por las ventanas, dar de comer a los animales en la calle, o almacenar residuos fuera de los contenedores de obra.
Guía rápida para evitar las multasSeparar los alimentos y verterlos en los contenedores adecuados sólo tiene un obstáculo: diferenciarlos.- Contenedor amarillo. En él se deben depositar sólo envases de tres tipos: plástico (botellas de agua o refrescos, detergentes, suavizantes, bolsas de comercios, bandejas de corcho blanco, tarrinas de yogur...), envases metálicos (latas y botes de refrescos, de cerveza, de conservas, bandejas de aluminio...) y envases tipo brik. - Contenedor azul. En éste se deben verter envases de cartón bien plegados (todo tipo de cajas de cartón como las de los cereales, de galletas, de zapatos, de comidas congeladas, etc.), papel de envolver, hojas, periódicos, revistas, cuadernos, libros, etc.- Iglú verde. Este contenedor está destinado sólo a envases de vidrio (botellas de vino, licores..., frascos de perfumes o tarros de vidrio).
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