Barcelona

Madrid-Barajas se convierte en un aeropuerto cardioprotegido

Habrá 65 Puntos en las terminales
Habrá 65 Puntos en las terminaleslarazon

El Aeropuerto de Madrid-Barajas cuenta con 65 Puntos de Rescate Cardiaco con el objetivo de auxiliar a los usuarios en caso de paro cardiaco y ofrecer al pasajero los mejores servicios de atención dentro de sus instalaciones.De este modo, Madrid-Barajas se convierte en un Aeropuerto Cardioprotegido, dentro del plan nacional que a nivel de red mantiene Aena para dotar a los aeropuertos de Puntos de Soporte Vital. Tras la puesta en servicio en Madrid, con de aparatos semiautomáticos dotados de la más alta tecnología, se continuará en Barcelona, para seguir en los aeropuertos con mayor número de pasajeros hasta la cobertura en todos ellos.Los Puntos de Rescate Cardiaco que se han instalado a lo largo de las 4 terminales del Aeropuerto de Madrid- Barajas (36 en T1, T2 y T3 y 29 en T4 y T4S), no sólo realizan funciones de soporte para los desfibriladores, sino que también facilitan los primeros eslabones de la cadena de supervivencia hasta que lleguen los servicios médicos de urgencia, que en todos los aeropuertos ya cuentan con equipos de desfibrilación.Para ello, como primera asistencia, cada uno de los 65 aparatos determina inicialmente la necesidad o no de aplicar una descarga e indica al personal que lo está utilizando los pasos a seguir. Simultáneamente, y como segunda asistencia, las columnas en las que están instalados los desfibriladores envían una alarma de aviso al Centro de Gestión Aeroportuaria (CGA) para que active la asistencia del Servicio Médico en el lugar correspondiente.

Asimismo, estos puntos permiten controlar y mantener en perfectas condiciones de uso los desfibriladores. Para ello envían a la empresa responsable de su instalación y mantenimiento notificación de incidencias, tanto de utilización del desfibrilador como de fallo técnico, y permiten la supervisión online del estado del mismo (batería, hardware, sucesos....). Además, los sistemas disponen también de batería autónoma, lo que garantiza unos mínimos de funcionamiento pese a cortes de suministro eléctrico.En cuanto a seguridad en su uso, las columnas de desfibriladores son accesibles mediante un dispositivo para el personal autorizado del Aeropuerto que voluntariamente haya realizado un curso básico de formación. No obstante, y dada la sencillez de su uso, las cabinas también pueden ser forzadas en caso de emergencia por el personal médico o usuarios en general.

FORMACIÓN VOLUNTARIAPara facilitar la intervención en situaciones de emergencia y en eventualidades más concretas, como pueda ser ésta de fallo cardiaco, el Aeropuerto de Madrid-Barajas ha impartido una acción formativa voluntaria entre el personal no sanitario que trabaja en sus instalaciones cuyo objetivo es el conocimiento y práctica de técnicas de primeros auxilios y manejo de desfibriladores semiautomáticos. Este personal, en total más de 300 personas, pertenece tanto a Aena, como a los diferentes concesionarios, compañías aéreas y Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que prestan sus servicios en Madrid-Barajas.El curso, diseñado por la American Heart Association bajo el título «Salvacorazones DEA», ha sido impartido por la Fundación Médico Rural, está acreditado por la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias y cuenta con titulación válida a nivel nacional e internacional.Con este curso, una amplia variedad de personal que trabaja en el aeropuerto se ha formado para administrar una reanimación o resucitación cardiopulmonar de modo seguro, oportuno y eficaz en adultos, niños y lactantes; se han instruido en el uso de desfibriladores externos automáticos y mascarillas para administrar respiraciones y han aprendido técnicas para auxiliar a una víctima en caso de asfixia.

DESFIBRILADORES INTELIGENTESLa parada cardiorrespiratoria fuera de un hospital es la primera causa de muerte entre la población española, superando en cuatro veces el número de víctimas de accidente de tráfico. En este marco, el tiempo de respuesta ante estas eventualidades es clave para la supervivencia del paciente, y el único tratamiento conocido para revertir la mayor parte de estas emergencias médicas es el uso de desfibriladores.En el caso de un gran aeropuerto como es Madrid- Barajas, por el que pasan al día alrededor de 190.000 personas, la mejor solución para asistir de forma rápida y vital a aquellos usuarios que presenten una posible parada cardiorrespiratoria hasta que lleguen los servicios de emergencia es el uso de desfibriladores semiautomáticos.Estos aparatos cuentan con un sistema de análisis que examina el ritmo cardiaco del paciente y determina la necesidad y la posibilidad de aplicar una descarga. Además, cada desfibrilador va indicando en todo momento los pasos a seguir por lo que la sencillez de su uso hace que el personal no médico pueda manejarlo con seguridad y eficacia.