Manises pierde un 16 por ciento de pasajeros frente al tres de 2008

El aeropuerto de Manises perdió el pasado mes de abril un 15,9 por ciento de pasajeros, lo que se traduce exactamente en 80.000 pasajeros menos que el mismo mes del año anterior. La cifra se convierte en más preocupante si se tiene en cuenta que el año pasado por estas fechas la caída de pasajeros en el aeródromo valenciano fue solamente de un tres por ciento (ya empezaban a sentirse los síntomas de la crisis económica).

El caso de Alicante es todavía peor. El pasado mes de abril el aeropuerto de El Altet perdió un 6,1 por ciento de pasajeros, algo que contrasta mucho con la cifra del mismo mes del año pasado, cuando el número de pasajeros aumentó un 10 por ciento.

Ahora bien, no todo son malas noticias. El descenso en el número de pasajeros de los últimos meses tanto en Manises como en Alicante ha sido espectacular. En el mes de febrero, la caída fue de un 31,4 por ciento en Valencia y de un 17,8 por ciento en Alicante; el mes de marzo, a pesar de la celebración de las Fallas, fue mucho peor, ya que en Valencia se repitió la misma cifra que el mes anterior, mientras que en El Altet se alcanzó un 20 por ciento de bajada en el número de viajeros.

Por lo tanto, pasar de esas cifras de vértigo a las actuales implica una mejoría para las dos ciudades, y deja abierta la posibilidad de que el mes próximo los números den alguna que otra alegría, ya que cabría esperar que durante el mes de mayo se vaya produciendo ya el tan deseado incremento.

Otra de las buenas noticias es que ni Manises ni Valencia presentan los descensos de pasajeros más graves de España. De hecho, por delante hay muchos otros aeropuertos. El caso más flagrante es el del aeródromo de Vitoria (donde Ryanair cerró su base en agosto de 2007), que ha experimentado un descenso del 50,6 por ciento en el número de pasajeros. Le sigue Pamplona, con un 37,6 por ciento, Almería con un 32 por ciento y Valladolid con un 28 por ciento. En cuanto al incremento de pasajeros, destaca el fuerte aumento en el aeropuerto de Reus, con un 80 por ciento. Las demás subidas son más discretas y en ciudades muy turísticas como Tenerife o Ibiza.