Obama afirma que Estados Unidos está en el camino de la «recuperación»

Nueva York- El presidente Barack Obama reconoció ayer en su discurso semanal de radio e internet que «estamos consiguiendo logros (que nos llevan) hacia la recuperación, pero debemos asegurarnos de que el legado de esta recesión sea una economía estadounidense que recompense el trabajo y la innovación». Con estas palabras, decidió terminar el líder estadounidense su intervención de los sábados. Obama utilizó este discurso para presionar a los legisladores y que aprueben su reforma sobre las tarjetas de crédito. El presidente estadounidense quiere terminar con la letra pequeña de los contratos donde se advierte el derecho a subir de forma repentina el interés de estas tarjetas y las multas injustas que se imponen a los consumidores. El líder demócrata quiere que antes del 25 de mayo esta reforma esté en la mesa del despacho oval para rubricarla y hacer que entre en vigor lo más pronto posible. A juicio del mandatario, «no hay tiempo para retrasos». «Necesitamos el flujo de crédito en nuestra economía, pero no podemos tolerar que las ganancias dependan de los malentendidos de las familias de clase trabajadora. Esos días ya han terminado. Los estadounidenses saben que tienen la responsabilidad de gastar sólo lo que permiten sus ingresos y de pagar sus deudas. Pero también tienen el derecho a no ser estafados por los repentinos aumentos en el interés, multas injustas y tarifas escondidas», concluyó el presidente en su discurso de radio e internet. Obama pronunció estas palabras un día después de que el departamento de Trabajo revelase los datos de paro de abril, en el que se destruyeron 539.000 puestos empleos. El pasado 30 de abril la Cámara de Representantes aprobó la legislación de la reforma de las tarjetas de crédito respaldada por la Casa Blanca que limita la capacidad de las compañías financieras a aumentar de forma retroactiva el interés de las mismas tarjetas. Además, requeriría que se notificase con 45 días de antelación a los consumidores los cambios de dichos intereses. Obama denunció que muchas ocasiones se aumentan sin realizar ningún tipo de aviso los consumidores. El Senado tiene previsto pronunciarse sobre esta legislación en los próximos días en el Congreso. El sector de la banca que se opone a la iniciativa del presidente ha advertido que estas medidas podrían cortar el flujo de crédito que se proporciona a los estadounidenses y subir los propios intereses. El mismo Obama tiene previsto hacer campaña por esta medida la próxima semana en Nuevo México y Arizona, donde tiene preparados dos mítines del estilo de campaña electoral. Este tipo de actos le han dado resultado en ocasiones anteriores cuando ha tenido que presionar a los legisladores para que aprobasen su plan de estímulo económico de 787.000 millones de dólares.