Participar en la gestión

Lo hemos publicado demasiadas veces. Los aeropuertos valencianos no son tratados como otros de España. Esta realidad se ha agravado con las nuevas instalaciones de El Prat de Barcelona. No es que esté contra esa obra. La ciudad condal es un centro importante, lo ha sido siempre, que merece atención. Pero su engrandecimiento no debe ampararse en el descuido de los demás, especialmente si ese perjuicio afecta a Manises y El Altet. El Gobierno central margina a Valencia y a Alicante y, sin embargo, ampara a Málaga. Es como para pensar en la intencionalidad política, sobre todo si las obras de ampliación se van retrasando, temores que ya ha expresado el conseller de Infraestructuras, Mario Flores, quien advirtió del riesgo de que estas ampliaciones se dilaten tanto en el tiempo que, cuando estén finalizadas, se queden pequeñas. La Generalitat considera imprescindible la ejecución inmediata de las obras.Ante esta diferencia de inversiones, tal como expuso ayer Flores al ministro Blanco, se hace necesario que las Comunidades autónomas, en este caso la Generalitat, participe en la gestión de los aeropuertos como sucede con los puertos. Así habrá más racionalidad en la utilización del dinero público y más igualdad de trato.