Israel responsabiliza a Hizbulá de un ataque en los Altos del Golán que ha dejado diez muertos

Al menos diez civiles israelíes, la mayoría niños y adolescentes, han muerto y más de 40 han resultado heridos como consecuencia del impacto de al menos 40 cohetes lanzados durante la tarde del sábado sobre la localidad de Majdal Shams, en los Altos del Golán, territorio que Israel arrebató a Siria durante la Guerra de los Seis Días (1967) y que se anexionó de forma efectiva en 1981. Además, hasta nueve de los heridos se encuentran en estado crítico, según los servicios de emergencia israelíes, el Magen David Adom, que precisó que las víctimas tienen entre 10 y 20 años de edad.

Tras un primer comunicado oficial en el que informaban del impacto de un proyectil procedente de territorio libanés en la zona de Majdal Shams sin hacer referencia a la posible autoría, el Ejército israelí acusaba a Hizbulá del ataque que causó la muerte a los diez jóvenes israelíes. «La organización terrorista Hizbulá está en el origen del lanzamiento de un cohete sobre un campo de fútbol en Majdal Shams», aseguraban las Fuerzas de Defensa de Israel en una nota oficial.

Sin embargo, en una acción poco habitual, la organización chií libanesa negó cualquier responsabilidad sobre el ataque contra el Golán. En un comunicado, Hizbulá desmintió «categóricamente las acusaciones de ciertos medios enemigos y diversas plataformas mediáticas sobre el objetivo de Majdel Shams» y destacó que «la Resistencia Islámica no tiene nada que ver con el incidente».

Fuentes de la organización atribuyeron al sistema antimisiles israelí la responsabilidad del impacto del proyectil sobre la zona donde jugaban los menores mientras trataba de interceptar un cohete lanzado desde suelo libanés. Horas antes, las fuerzas israelíes habían acabado con la vida de cuatro milicianos de Hizbulá.

Por su parte, desde el Ejército israelí se ha informado de la detección de una treintena de proyectiles lanzados desde territorio libanés. «Los cazas de la defensa aérea interceptaron con éxito varios misiles. El resto de misiles cayeron en zona abierta, sin víctimas», recogían las FDI en su canal oficial. Otros diez proyectiles fueron detectados en la zona de Neve Ativ sobre seis de la tarde. Todos ellos «se precipitaron en una zona abierta y no han provocado víctimas».

El ministro de Defensa Yoav Gallant procede a evaluar la situación «con el jefe del Estado Mayor Herzl Halevi y los máximos responsables de la seguridad tras el lanzamiento de cohetes a Majdal Shams», según se hizo eco el diario Haaretz. Asimismo, el ministro de Exteriores, Israel Katz, hacía público a final de la tarde de ayer haber mantenido un encuentro con el primer ministro Benjamin Netanyahu sin ofrecer más detalles del mismo, recogía el medio local The Times of Israel. «Hizbulá ha cruzado todas las líneas rojas (…) Nos enfrentamos a una guerra total», advertía el jefe de la diplomacia israelí.

El mismo digital se hacía eco de unas declaraciones anónimas de oficiales del Gobierno israelí que avanzaban una «muy agresiva» respuesta a lo ocurrido ayer en el Golán. De confirmarse la autoría de Hizbulá, el ataque contra la localidad situada en los Altos del Golán sería el más sangriento perpetrado por la organización chií tentáculo de Irán desde que comenzó la guerra en Gaza.

El partido-milicia ataca de manera regular desde su feudo del sur libanés zonas urbanas e instalaciones militares del norte de Israel con el lanzamiento de cohetes y misiles en represalia por la ofensiva del Ejército israelí en Gaza, pero a tenor de las declaraciones de su líder máximo, Hassan Nasrallah, la organización considerada terrorista por la Unión Europea y Estados Unidos rehúye una confrontación bélica directa con Israel.

Las acciones de respuesta de las Fuerzas de Defensa israelíes han causado desde el 8 de octubre pasado al menos 300 milicianos del grupo. En varias ocasiones desde los mandos militares israelíes y el Gobierno presidido por Netanyahu se ha avisado de la posibilidad de una operación militar a gran escala al otro lado de la frontera. Lo ocurrido en la jornada de ayer acerca más aún la posibilidad.