El factor ruso

¿Cuáles son los principales retos para la seguridad internacional en este 2017?

–Siempre hay acontecimientos impredecibles, pero el terrorismo internacional y la inestabilidad internacional, son los principales asuntos sobre la mesa en este año.

¿Cree que, después de la victoria del presidente Donald Trump, el mundo es más inestable?

–Claramente, el resultado de las elecciones norteamericanas ha supuesto una inyección negativa en el sistema, pero más que inestable, podemos afirmar que la situación es incierta. Creo personalmente que aún debemos mantenernos a la espera de cómo se desarrollan los acontecimientos en Estados Unidos.

Alemania, Países Bajos y Francia advierten del peligro de ciberataques durante las próximas campañas y elecciones. ¿Piensa que Rusia realmente está interviniendo en la política europea?

–Creo que de hecho, ya hemos podido apreciar ésta intervención rusa, en cierto grado, por ejemplo en el apoyo a determinados partidos políticos (especialmente los del ala radical de la derecha como el Frente Nacional (FN) en Francia) en algunos países. Parece que los ciberataques constituyen su nueva herramienta por lo que la población está preocupada en este sentido.

El grupo terrorista Estado Islámico (EI) está sufriendo constantes derrotas en Irak y en Siria. ¿Ante la pérdida de terreno en el califato, dirigirán los yihadistas su punto de mira para atacar en territorio europeo?

–Europa está en el punto de mira de los yihadistas del Estado Islámico desde hace mucho tiempo. Sus derrotas en el campo de batalla significa que han estado diciendo a la gente que no acuda al terreno de combate, instándolos a que lanzasen ataques desde casa. O por otro lado, que han estado redireccionando sus efectivos y sus ataques a Europa y a otros lugares del mundo. Europa es claramente un objetivo prioritario, y esto es algo que sólo aumentará con el tiempo.

¿Amenaza el incremento de los movimientos populistas la seguridad internacional?

–Siempre ha habido movimientos populistas. Son peligrosos en tanto que añaden impredecibilidad e incertidumbre al proceso. Normalmente, son un reflejo de cuáles son las preocupaciones básicas de la gente, que no siempre coinciden con las verdaderas amenazas que hay allá fuera. Algo que supone un problema esencial de gobernabilidad.