Maduro desafía a EE UU y detiene al «número dos» del presidente Guaidó

«¿Vienen a por mí? Dale, aquí estamos», responde el líder opositor después de que el chavismo acusara a su jefe de Gabinete, Roberto Marrero, de «terrorismo».

De madrugada y con violencia. Así fue la detención de Roberto Marrero, jefe del despacho y «número dos» de Juan Guaidó, en la madrugada de ayer, hora local en Caracas, por parte de la policía política del régimen chavista, el temido Sebin. No habían pasado 24 horas desde que la Alta Comisionada de los Derechos Humanos de Naciones Unidas, la chilena Michelle Bachelet, denunciara que en Venezuela se registran detenciones arbitrarias y tratos vejatorios a presos políticos, ni mucho menos desde que en la Organización de Estados Americanos (OEA) se mostraran vídeos sobre torturas a detenidos en la Dirección General de Contrainteligencia Militar, cuando las fuerzas del Gobierno del presidente Nicolás Maduro volvieron a mostrar los dientes.

Ayer, pasadas las dos de la mañana, funcionarios del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin) allanaron primero la residencia del diputado Sergio Vergara, vecino de Marrero y cercano colaborador del presidente de la Asamblea Nacional. Al menos quince uniformados, con los rostros tapados, sometieron al parlamentario. «Estuve retenido tres horas sin poder utilizar mi teléfono. Se llevaron varias cosas de mi vivienda. Me exigían que pusiera la cara contra la pared y las manos en la cabeza mientras revisaban todo lo que había en mi casa. Yo les reiteraba que era diputado y estaban violando mi inmunidad (parlamentaria). Tras mantenerme así durante tres horas me sentaron en el sofá e ingresaron dos civiles con credenciales del Ministerio Público. Presumo que eran los fiscales Farik Mora y Dinorah Bustamante», narró Vergara una vez culminada la acción policial.

Al diputado le preguntaron por la casa de Marrero, cuya puerta se ubica a pocos metros de la suya. Entretanto, el abogado grabó dos notas de voz que distribuyó a varios grupos de Whatsapp. La primera registró el sonido de continuados golpes a objetos: «En este momento están entrando un grupo del Sebin, están tirando la pared», dice Marreno en la grabación. En la siguiente afirma: «El Sebin está aquí, lamentablemente llegaron a mí. Sigan en la lucha, no se detengan, cuiden al presidente (Guaidó). Que sea lo que Dios quiera, Dios los bendiga, fuerza y fe. El pueblo venezolano no debe detenerse por esto y debemos entender que el que se cansa pierde».

Instantes más tarde, irrumpieron los funcionarios en su residencia, lo arrestaron y requisaron la casa donde vive con su esposa e hijos, los cuales estaban fuera del país. «A Roberto se lo llevaron esposado. Cuando lo sacaron él me gritaba que le metieron dos fusiles y una granada», detalló el diputado Vergara.

Durante varias horas el paradero de Roberto Marrero era desconocido. La Asamblea Nacional calificó su detención como un «secuestro». El Gobierno bolivariano mantuvo silencio al respecto durante buena parte del día, al menos hasta el cierre de esta edición. Se pudo confirmar, sin embargo, que la «mano derecha» de Guaidó fue recluido en la cárcel del Helicoide.

La respuesta de Juan Guaidó fue que Nicolás Maduro no se atreve a encarcelarlo a él, «entonces buscan a los más cercanos, los amenazan y los secuestran». Afirmó que desde el poder central se insiste en aumentar el coste de la transición y afirmó que hay dudas sobre el autor de la orden de arresto contra Marrero. Además, recordó a los efectivos del Sebin lo que le ocurrió a los funcionarios que intentaron retenerlo en enero pasado, ahora detenidos también en el Helicoide. «¿Cuál es el mensaje, que van a ir por mí? Como diríamos en La Guaira, ¡Dale! », subrayó.

Guaidó, así mismo, destacó que el secuestro de Marrero ocurre cuando en el país se encuentran enviados del Grupo de Contacto de la Unión Europea y también una misión técnica de la Alta Comisionada de los Derechos Humanos de la ONU.

Según el líder opositor, el Gobierno chavista no lo detendrá en su búsqueda de una transición política. «Lamentablemente el secuestro de gente cercana no es nuevo para nosotros. Llevamos años sufriendo el encarcelamiento, la persecución, la tortura. Cantan victoria porque secuestraron a mi jefe de despacho, pero para nosotros la victoria es poder entregar medicamentos. En 2014 secuestraron a Leopoldo López y allanaron la sede de Voluntad Popular, pero no pudieron eliminar el partido. En 2018 se llevaron secuestrado a (Juan) Requesens y mataron a (Fernando) Albán, y no desaparecieron sus ideas. Aquí estamos de pie ».

Al cierre de esta nota, los tres abogados que asumieron la defensa de Marrero se encontraban en tribunales para esperar la audiencia en la que se le imputarían delitos que, hasta el momento, no habían sido definidos. El tribunal correspondiente investiga casos de terrorismo, y está encabezado por la juez Carol Padilla, según un documento que se mostraron a Sergio Vergara.

Más de doce horas después de la detención del opositor Marrero, se pronunció el Gobierno chavista. En una declaración televisada, el ministro del Interiorvenezolano, Nestor Reverol, dijo que el opositor fue arrestado por ser «responsable directo de grupos criminales», y afirmó que «se le incautó armas de guerra y dinero en efectivo».

«Nuestro servicio de inteligencia ha desmembrado una nueva red criminal que quería efectuar ataques terroristas en Venezuela. Había amenazas contra líderes políticos. Ello condujo a la detención del señor Roberto Marrero», explicó el ministro del Interior de Nicolás Maduro.

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