Independencia de Reino Unido

Guerra civil en el partido «tory»

La Razón
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Algo extraordinario está ocurriendo en el panorama político británico. Una de las maquinarias políticas más competentes del último siglo, el Partido Conservador, se está desgarrando a la vista de los votantes. La causa de esta guerra civil es el referéndum sobre la pertenencia a la Unión Europea (UE). ¿Cómo se ha llegado a este punto y cuáles son las probables consecuencias de esta asombrosa situación? Primeramente, hay que saber que ningún tema divide tanto a los «tories» como la UE. Cabe recordar que fueron las discrepancias sobre Europa lo que provocó la dramática caída de Margaret Thatcher.

Cuando David Cameron fue elegido líder del Partido Conservador en 2005, trató de relegar esta amarga disputa al pasado. Fracasó y las divisiones reaparecieron rápidamente. Cameron se aseguró una tregua temporal ofreciendo un referéndum sobre la UE si los «tories» ganaban las elecciones parlamentarias de 2015. Esto es lo que sucedió y cuando el partido venció, comenzó la desintegración.

Cameron no pudo predecir la implosión política que vendría después. Él y sus aliados se situaron como oposición dentro de su partido, pero no supieron calcular la magnitud. Aproximadamente, el 65% de los miembros de la formación y la mitad de los «tories» que están en el Parlamento apoyan el Brexit. Aunque la mayoría del Gabinete de Cameron está con el primer ministro, hay dos grandes figuras dentro del Partido Conservador –Michael Gove y Boris Johnson– que lideran la campaña para salir de la UE.

Tampoco nadie supo predecir el ataque venenoso que ha rodeado a la campaña del referéndum. No hay día sin un intercambio de insultos entre los miembros del Gabinete. No es exagerado decir que muchos conservadores ven a Cameron con aversión y odio. La enemistad es mutua. Cameron ha acusado a sus oponentes dentro del partido de derrotistas y desleales que no aman a su país. La situación se torna más extraordinaria si tenemos en cuenta la tradicional agresividad dentro del Partido Conservador hacia sus líderes.

Así que ahora existe una posibilidad muy real de que Reino Unido vote salir de la UE. ¿Qué pasará después? Analicemos dos posibles escenarios.

El primero es el más simple. El 23 de junio una mayoría de británicos vota quedarse en la UE. Imaginemos que el voto se divide entre 55%-45%. Esto representaría un gran triunfo político para Cameron y le aseguraría su puesto como primer ministro hasta las próximas elecciones parlamentarias en 2020. Pero, ¿sería Cameron capaz de recomponer a su Gobierno y a su partido? Dada la magnitud y la naturaleza tóxica de la actual pelea dentro del partido parece algo muy dudoso. ¿Incluirá Cameron a Johnson y Gove como miembros de su Ejecutivo? ¿Querrían ellos y sus compañeros sentarse en el Gabinete con el hombre al que acaban de maltratar? Según los rumores, Cameron está preparado para perdonar a Gove, pero intentará destruir a Boris Johnson tan lenta y dolorosamente como pueda. En otras palabras, la guerra civil continuará.

El segundo escenario es más complicado. Para ello vamos invertir el resultado de la votación. El 55% vota a favor de salir de la UE. ¿Qué hará Cameron? ¿Dimitirá de forma inmediata? Es poco probable, pero resulta obvio que no querrá encabezar las negociaciones con la UE para la salida de Reino Unido. Así que quizá seguiría como primer ministro y líder de los «tories» hasta otoño. ¿Quién le sucedería? Según información fiable, la campaña del Brexit aún tiene tres candidatos en mente. Gove sería la mejor elección, pero el siempre popular Johnson quizá sea imparable. También podría haber algún otro. Lo bueno de este escenario es que el partido antieuropeo UKIP se derrumbaría, y sus votantes regresarían al Partido Conservador, con lo que éste se aseguraría la victoria en futuras elecciones. Los incrédulos dirían –yo creo que están en lo cierto– que los «tories» estarían tan divididos que los votantes no confiarán en ellos otra vez. Sea cual sea el resultado, el Partido Conservador británico nunca será el mismo.

*Profesor de Teoría Política en el King’s College de Londres