La Justicia belga rechaza la petición de libertad vigilada para el pederasta Dutroux

El Tribunal de Aplicación de Penas de Bruselas ha rechazado este lunes la solicitud de un brazalete electrónico para el pederasta Marc Dutroux, condenado a cadena perpetua en 2004 por la violación y asesinato de varias niñas, medida que le hubiera permitido cumplir a domicilio el resto de su pena.

Dutroux ha conocido el fallo del Tribunal en su celda de la prisión de Nivelles, ya que ni él ni su abogado han acudido a la sala, según recogen los medios belgas, que apuntan que el brazalete electrónico era una posibilidad pero no la única para lograr la libertad. Según la legislación del país, el pederasta podrá solicitar formalmente a partir del 30 de abril su libertad condicional.

Dutroux acudió a la Justicia belga el pasado 4 de febrero para que le fuera autorizado el uso del brazalete electrónico, pero tanto la Fiscalía como la dirección del centro penitenciario de Nivelles se pronunciaron en contra de este beneficio para el condenado.

Este mismo lunes era la propia madre de Dutroux quien, a través de una entrevista concedida al diario belga 'Le Soir', advertía de que si se concedía la libertad a su hijo, éste "volverá a delinquir".

El caso de Dutroux conmocionó a la ciudadanía belga, debido a la atrocidad de los crímenes. Dutroux fue sentenciado a cadena perpetua en junio de 2004 por el secuestro y violación, entre junio de 1995 y agosto de 1996, de seis niñas y adolescentes belgas: Julie Lejeune, Melissa Russo, An Marchal, Eefje Lambrecks, Sabine Dardenne y Laetitia Delhez.

También se le halló culpable del asesinato de dos de ellas, Marchal (17 años) y Lambrecks (19 años), y responsable de la muerte de Lejeune y Russo, dos niñas de ocho años que aparecieron muertas en un terreno de su propiedad.