El Gobierno de Donald Trump

La «tolerancia cero» con los inmigrantes no pasa factura a Trump

La aprobación de Donald Trump se sitúa en el 41%

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La aprobación de Donald Trump se sitúa en el 41%

Cuando el presidente Donald Trump tomó la decisión de separar a los niños de sus familias en las fronteras, mostró lo tajante que es en su política migratoria para proteger sus fronteras de la llegada de inmigrantes ilegales. Su política de tolerancia cero desató las críticas y protagonizó las portadas de los influyentes semanarios norteamericanos que retrataron al presidente y, por ende, al país como una América inhumana.

Contra todo pronóstico, esa decisión, al igual que las muchas polémicas protagonizadas por Trump en el año y medio que lleva en el poder, no están mermando su popularidad. Si hace una semana el presidente gozaba de un envidiable 45% de aceptación de su gestión, tras tomar esa decisión, su nivel de aprobación se sitúa en el 41%, según datos de Gallup publicados este lunes.

No obstante, la ola de protestas y la indignación que provocó esa decisión le forzó a dar marcha atrás y firmar una orden ejecutiva para acabar con ese proceder que el propio presidente había calificado de inevitable.

Su índice de aprobación se mantiene en torno al 40% desde mediados del mes de abril de 2017, cuando EEUU creó 211.000 empleos y la tasa de empleo bajó hasta el 4,4%, mínimos desde 2007. De hecho, su aprobación se sitúa en términos similares a los de los anteriores presidentes de EE UU en el mes de junio de su segundo año de mandato: Jimmy Carter (42%), Ronald Reagan (44%), Bill Clinton (44%) y Barack Obama (47%).

Todo ello, cuando quedan sólo cinco meses para que se celebren las elecciones de Midterm o elecciones de mitad de mandato, consideradas un plebiscito a la gestión del presidente. A tenor de los índices de aprobación de la gestión de Donald Trump y la mayor movilización de los republicanos en estos comicios, todo apunta a que Trump revalidará su gestión. De hecho, el presidente ya ha avnazado que la lucha contra la inmigración ilegal y la seguridad fronteriza se mantendrán como ejes de la campaña para las elecciones parlamentarias de noviembre.