La UE pone a España de ejemplo para Grecia

Grecia asumió hoy formalmente la presidencia de turno de la Unión Europea, mientras lucha por dejar atrás su crisis económica en un semestre marcado por las elecciones al Parlamento Europeo (PE) y el auge del euroescepticismo.

La Presidencia griega de la Unión Europea comenzó ayer en medio del rechazo de la oposición al Gobierno bipartito de Andonis Samaras y la movilización del sector público sanitario contra los recortes. Los actos que dieron el pistoletazo de salida a esta nueva Presidencia semestral de la UE quedaron afeados por la decisión del líder de Syriza y cabeza de lista para las elecciones europeas de mayo de la izquierda europea, Alexis Tsipras, de no acudir, como muestra de lo que será su campaña, centrada en el rechazo a la política de austeridad y recortes llevada a cabo por la UE contra la crisis.

Pese a ello, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, insistió en la importancia de este momento en el que Grecia toma las riendas de la UE y animó al Gobierno heleno a seguir por el camino de las reformas y aplicar «con determinación» el programa fiscal y las medidas todavía pendientes. «Aunque el cielo se está despejando, todavía hay nubes, por eso es el momento de aplicar con determinación el programa fiscal, avanzar en las privatizaciones y la liberalización de las profesiones», manifestó Barroso en una rueda de prensa conjunta con Samaras. Para argumentarlo, Barroso puso como ejemplo el éxito cosechado por España en la aplicación del programa de asistencia a sus bancos, que ahora termina habiendo dispensado 41.300 millones de euros de los 100.000 millones ofrecidos por el Eurogrupo para reestructurar el sector. «España ha tenido un programa especial para los bancos y esperamos que salga con éxito del programa este mes», dijo. «De hecho, el apoyo dado a los bancos españoles está dando frutos, y este programa se ha aplicado con mucho éxito», agregó. A su juicio, «es una demostración muy clara de que los programas funcionan si se aplican con determinación y de forma adecuada». Por su parte, Samaras insistió en que su país está saliendo de la crisis. «Aunque la gente todavía sufre, ha empezado el proceso de reducción del paro, atraer inversión y poner en marcha un sistema que no sea burocrático y montado contra los ciudadanos, sino liberal», aseguró.

«Nuestros principios serán sobre todo combatir los problemas vitales que amenazan Europa y luchar por la recuperación económica, contra el desempleo un problema muy contemporáneo, garantizar la cohesión social y la seguridad europea dentro y fuera de nuestras fronteras», manifestó el primer ministro respecto al desarrollo de esta presidencia.

Asimismo, el ministro de Finanzas heleno, Yannis Stournaras, informó a la Prensa de su deseo de no solicitar un tercer rescate, aunque sean necesarias otras soluciones. «No queremos más préstamos, pero examinaremos todas las alternativas», aseguró Stournaras, quien dijo que su Gobierno buscará «la mejor solución para los ciudadanos griegos», pues lo aplicado hasta ahora es de gran dureza.

El programa de ayuda a Grecia termina en 2014, aunque siguen los problemas. En su último informe, el Fondo Monetario Internacional dijo que el país heleno tendrá en agosto próximo unas necesidades de financiación adicionales de 4.400 millones de euros y de 6.500 millones en 2015. De ahí que a finales de 2013 algunos países del Eurogrupo avanzaran que podría necesitar un tercer rescate. Para el ministro de Finanzas griego, aventurar ese escenario es todavía «prematuro».