Secuestros

Liberados tres empleados de la Cruz Roja Internacional secuestrados en Yemen

Tres trabajadores del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), de nacionalidad suiza, keniana y yemení, secuestrados hace tres días en el Yemen, fueron liberados anoche por sus secuestradores, informó hoy a Efe la portavoz de esta organización en el país, Jessica Barry.

"Mis tres compañeros han llegado ya a Adén (sur). Estamos muy contentos de que el secuestro haya acabado rápidamente", afirmó Barry, quien agregó que se encuentran en buen estado y han recibido un buen trato por parte de sus secuestradores.

Los rehenes liberados fueron raptados hace tres días en la ciudad de Yaar, a unos 80 kilómetros al este de Adén y en la provincia de Abien, por miembros de la tribu Muraqasha, que interceptaron el vehículo en el que se trasladaban los empleados del CICR.

Fuentes de seguridad señalaron a Efe que mediadores tribales han intervenido para lograr la puesta en libertad de los rehenes, aunque no precisaron cuáles han sido las exigencias de los secuestradores.

Asimismo, la mediación tribal ha hecho posible la liberación anoche de dos ingenieros egipcios que habían sido secuestrados a principios de mayo en Abien por el clan Muraqasha, informó hoy el embajador de Egipto en el Yemen, Ashraf Aql.

En declaraciones a medios de comunicación estatales yemeníes, Aql agradeció a los mediadores tribales y a las autoridades del país los esfuerzos para poner en libertad a los rehenes, Abdel Naser Jalaf y Hanafi Higazi, directivos de una fábrica de cemento en Abien.

Integrantes de la misma tribu raptaron la semana pasada a otros dos trabajadores de la Cruz Roja, uno yemení y otro indio, que fueron liberados horas después.

Los secuestros de extranjeros son frecuentes en el Yemen, y en su mayoría los llevan a cabo miembros de tribus que los usan para presionar al Gobierno yemení para que responda a sus peticiones.

El pasado día 9, dos finlandeses y un austríaco, que estaban secuestrados en el este del país desde diciembre pasado, fueron puestos en libertad y entregados a Omán, tras el pago de un rescate a los secuestradores, integrantes de tribus que apoyan a Al Qaeda.

El Yemen, el país más pobre de la península Arábiga, se ha vuelto más inestable e inseguro desde que comenzaran las protestas en enero de 2011 contra el entonces presidente, Alí Abdalá Saleh, quien abandonó definitivamente el poder en febrero de 2012.