Cameron envía soldados y perros adiestrados a Calais

La crisis migratoria en el Eurotúnel no cesa. Las fotografías de las caóticas escenas que se viven en Calais son cada vez más impactantes. La tensión provoca constantes enfrentamientos entre aquellos que quieren cruzar el canal y la Policía. Pero nada impide que, cada noche, cientos de personas intenten colarse en las instalaciones en busca de una vida mejor. Ayer, después que las Fuerzas de Seguridad francesas abortaran un millar de intentos de penetrar en las instalaciones del túnel ferroviario, el «premier» David Cameron advirtió de que «es más que probable que esta situación se alargue durante todo el verano». Recién aterrizado de su gira por Asia, el primer ministro presidió una reunión del comité Cobra de emergencia para analizar un panorama que tachó de «inaceptable». «Tenemos que trabajar codo a codo con las autoridades francesas para reducir la presión. Enviaremos más perros detectores, más vallas y más asistencia para conseguirlo», dijo.

Entre las medidas adoptadas, el Ejecutivo también enviará al Ejército, aunque su labor se limitará a ceder sus bases, como la de los Gurkas en Folkestone y la del Tercer Batallón en Canterbury, como aparcamientos provisionales para aliviar el colapso de la autopista M-20, taponada por miles de camiones. Londres ha puesto en marcha en el condado de Kent, donde está la terminal del Eurotúnel, la llamada «operación Stack», que permite a los camiones aparcar en la autopista cuando hay problemas en la frontera. Al cierre de esta edición, más de 6.000 camiones estaban completamente parados formando colas de más de 28 km. Los soldados, que estarán desarmados, darán el relevo este fin de semana a la Policía local de esta localidad al sureste de Inglaterra, que se encuentra desbordada.

«Al otro lado de la frontera hay gente que está intentando entrar en este país de forma ilegal, y aquí, en Reino Unido, tenemos a conductores y veraneantes sufriendo las consecuencias», señaló el «premier». En este sentido, el líder «tory» advirtió de que los inmigrantes sin papeles no encontrarán refugio en Reino Unido, ya que el Gobierno tiene intención de deportarlos. Además, recordó que tampoco tienen ya a su disposición los subsidios sociales después de los recortes implementados en el sistema de bienestar para evitar los abusos cometidos en el pasado.

El líder del partido euroescéptico UKIP, Nigel Farage, y algunos diputados de las filas conservadoras habían pedido ya a Cameron enviar militares a Calais, para vigilar y proteger las aduanas británicas en el lado francés del Eurotúnel. Sin embargo, el primer ministro no parecía dispuesto a dar ese paso, y al menos de momento, harán sólo labores de apoyo, porque tal y como especificó, se tomarán las decisiones pertinentes tras los encuentros que mantiene con las autoridades galas. El general Patrick Cordingley señaló que «sería totalmente aceptable desplegar soldados no armados para asistir tanto a la Policía británica como a la francesa». «Pienso que los soldados podrían desempeñar una misión importante alrededor del Eurotúnel», matizó. Por otra parte, el Ejecutivo informó de que el levantamiento de la valla en Coquelles para proteger la Terminal estará concluida la próxima semana.

Aunque el paso del Canal de la Mancha ha sido siempre una importante vía de inmigración, Cameron se enfrenta a una creciente presión, ya que en los comicios de mayo, en los que salió reelegido, la inmigración fue la protagonista de la campaña. En concreto, prometió reducir a 10.000 el número de inmigrantes que llegan a las islas.

Francia pide a Reino Unido «estar a la altura»

El primer ministro francés, Manuel Valls, insistió ayer en la necesidad de que las autoridades británicas estén «a la altura» de los compromisos firmados y previstos sobre inmigración para poder hacer frente a la creciente presión en el túnel ferroviario que une Francia con Reino Unido bajo el Canal de la Mancha. De hecho, el presidente galo, François Hollande, abordó ayer por la noche la creciente presión migratoria en una conversación telefónica con el primer ministro británico, David Cameron. Francia «no puede actuar sola», subrayó Hollande.