Estados Unidos

Netanyahu se reúne con Obama por primera vez tras el pacto nuclear

Barack Obama y Benjamin Netanyahu durante una renuión en 2013
Barack Obama y Benjamin Netanyahu durante una renuión en 2013larazon

La visita se produce después del aumento de tensiones entre ambos líderes por el pacto nuclear iraní

Cuando el presidente Barack Obama llegó a la Casa Blanca tenía entre sus planes pasar a la historia como el líder que iba a solucionar el conflicto árabe-israelí. A punto casi de cumplir dos legislaturas y después de sonadas tiranteces con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ambos dirigentes se reunirán hoy en Washington con el objetivo de negociar un nuevo paquete de ayuda de entre ambos países, especialmente la renovación del tradicional soporte militar que Estados Unidos ofrece a su socio en Oriente Próximo. Se trata de la primera reunión entre los dos líderes tras la firma del acuerdo nuclear entre seis potencias mundiales e Irán, impulsado por Washington y al que Israel, y en concreto Netanyahu, se opusieron de forma frontal, hasta el punto de dañar las relaciones entre los dos países.

Ambos países tienen pendiente avanzar en el acuerdo de seguridad que expira en 2017, en virtud del cual Israel recibe 3.000 millones de dólares de Estados Unidos cada año. Aunque no hay un lista oficial de peticiones, a Netanyahu le gustaría recibir 5.000 millones durante los próximos diez años. En las conversaciones, también se ha planteado una nueva bomba que pueda destruir refugios subterráneos y aviones F-35, que son los aparatos militares más avanzados y costosos de la historia de Estados Unidos.

Con Irán como vértice y en el marco de la cooperación en seguridad, la edición digital del diario «Yediot Aharonotn» citaba ayer fuentes de la Casa Blanca para asegurar que Netanyahu tratará de conseguir un incremento en el esperado paquete de compensación por el acuerdo con Irán; negociaciones que según las mismas fuentes no tienen vistas de prosperar. En Israel se espera que la visita de hoy sirva para pasar página y mejorar las relaciones bilaterales, dañadas entre otras cuestiones por la falta de sintonía entre Netanyahu y Obama.