Guerra en Ucrania
Provocación prorrusa
- A pesar de que el Gobierno ha concedido una amnistía, las milicias prorrusas lo han ignorado y siguen ocupando edificios oficiales. ¿Es una provocación? ¿Tienen éstas el mismo poder que en Crimea?
–No. En el caso de Crimea existían lazos más específicos entre su población y Rusia. Sin embargo, la situación que se vive ahora en el este del país, en términos de intervención, está siendo exactamente la misma. Ya lo dijo Putin en un discurso que ofreció recientemente cuando se refirió a la pérdida de «territorios históricamente rusos» como «un crimen histórico». Hay muchas personas en Rusia que se sienten así y no piensan realmente en el este de Ucrania como un país diferente.
- ¿Están los servicios de Inteligencia rusas coordinando a las milicias rebeldes?
–Estos grupos están integrados por personal militar altamente capacitado, a pesar de que en sus uniformes no conste ningún tipo de insignia. Y su función es la misma que en Crimea: gente armada que se apropia de edificios del Gobierno y ayudados por un cuerpo militar fuertemente armado, así como civiles que se encargan de bloquear accesos y patrullar las calles. Todo esto supone una clara provocación.
- Sin embargo, mientras que en Crimea existía una mayoría rusa, en las regiones del este no es así...
–Claro y ahí reside una diferencia fundamental. Mientras que en Crimea más de un 40% de la población se mostraba proclive a la anexión a Rusia, en el caso actual la cifra es mucho menor, entre el 10 y el 18%. Así que a pesar de que estas milicias prorrusas cuentan con un importante respaldo militar, no tienen el apoyo de la mayoría de la población. También es clave destacar la presencia de los oligarcas que residen en provincias del este y cuyos lazos económicos con Rusia son muy relevantes.
- ¿Qué hubiera ocurrido si el Gobierno de Kiev no hubiera decidido intervenir militarmente en la zona del conflicto?
–Habrían invitado a una mayor desestabilización de la zona. Lo que ocurre es que el Gobierno no tiene la suficiente influencia ni los recursos necesarios.
*Directora de Ciencias Políticas de la Universidad de Arcadia de EE UU. Preguntas de Esther S. Sieteiglesias
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