Turquía

La guerrilla kurda siembra el terror en Turquía con cuatro atentados

El Gobierno islamista culpa al clérigo Gulen y al PKK de coordinarse para cometer los ataques, que han dejado al menos 14 muertos

Imagen de archivo de un atentado en Turquía
Imagen de archivo de un atentado en Turquíalarazon

El Gobierno islamista culpa al clérigo Gulen y al PKK de coordinarse para cometer los ataques, que han dejado al menos 14 muertos

Una serie de ataques contra las fuerzas del orden turcas acabaron ayer con la vida de al menos 14 personas y causaron heridas a más de 220, según informaron las autoridades locales. Aunque la autoría de la ola de atentados fue atribuida a los rebeldes kurdos del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), el Gobierno trató de relacionarlos con la organización del clérigo Fetulah Gulen, al que acusa de estar detrás del fallido golpe militar del pasado 15 de julio.

Dos de los ataques se llevaron a cabo con coches bomba y afectaron a dos cuarteles de Policía al este del país, mientras que el tercero y el cuarto –sendas explosiones en cunetas– afectaron a vehículos militares que transportaban a soldados en el sureste del país. El último consistió en un ataque contra un puesto de control policial. Las autoridades afirmaron que los asaltos fueron llevados a cabo por el PKK, que ha lanzado una campaña con este tipo de actos terroristas. La semana pasada, el comandante kurdo Cemil Bayik amenazó con aumentar el número de ataques contra la Policía en las ciudades turcas. La ola de atentados llega en un momento en el que el país está concentrado en reprimir a los que sean sospechosos de ser simpatizantes del movimiento dirigido por el clérigo Gulen, al que el Gobierno acusa de haber orquestado el fallido levantamiento militar del mes pasado, en el que murieron al menos 270 personas.

El primer coche bomba golpeó una comisaría en Van el miércoles, matando a un oficial de policía y a dos civiles. Las autoridades confirmaron que al menos otras 73 personas (53 civiles y 20 oficiales) resultaron heridas. Otra explosión golpeó el cuartel de Policía de Elazig ayer por la mañana, acabando con la vida de al menos 5 personas. Las autoridades han dicho que 146 personas resultaron heridas, 14 de ellas de gravedad. En Hizan, en la provincia de Bitlis, mientras tanto, a media mañana, cinco soldados y un guardia rural perdieron la vida después de que los rebeldes detonaran un artefacto explosivo mientras que un vehículo militar pasaba, informaron las autoridades. Otros cinco soldados fueron heridos en el ataque. Por último, la agencia de noticias Dogan ha informado sobre cómo la guerrilla turca atacaron un puesto de control policial.

El primer ministro turco, Binali Yildrim, viajó hasta Elazig para visitar el lugar del ataque, así como a los heridos. El «premier» declaró a los reporteros que tanto el PKK como el movimiento de Gulen están dirigidos por la misma «inteligencia» que está tratando de causar daño en Turquía: «[El movimiento de Gulen] ha perdido su firmeza y le ha pasado la tarea al PKK», a lo que añadió que «la inteligencia que dirige a ambos es la misma. Cuando la tarea de uno acaba, el otro la continua». Yildirim ha prometido luchar contra el PKK hasta que sea «eliminado». Lo hacía con estas palabras: «Ninguna organización terrorista obligará a esta nación a acobardarse en sumisión».

Desde Ankara, el presidente Erdogan dijo que Turquía ha sido atacada conjuntamente por varias organizaciones que estaban, según aseguró, en contacto cercano y «actuando bajo las mismas motivaciones incluso aunque tengan nombres diferentes». Reveló que las Fuerzas de Seguridad turcas han matado al menos a 182 rebeldes kurdos en las semanas que han seguido a la asonada militar fallida del 15 de julio, insistiendo en que no se ha debilitado la lucha nacional contra el PKK. El conflicto armado entre la guerrilla kurda y las Fuerzas de Seguridad de Turquía se reanudó el año pasado después de que el frágil proceso de paz colapsara. Ap