La carrera olímpica, un negocio de 18.954 millones

Si hubiéramos sabido cómo iba a evolucionar la economía inglesa y mundial entre 2007 y 2012, hubiéramos duplicado los esfuerzos para organizar los Juegos Olímpicos, afirmó meses atrás en una visita a Madrid el responsable de la cita de Londres, Sebastian Coe. Un año después de la celebración del evento deportivo más importante en la ciudad londinense, la economía británica no marcha como un tiro, pero los datos han puesto de relieve que los Juegos sí que han servido de importante estímulo para reanimarla. El evento repartió unos 13.000 millones de libras entre los ingleses, 11.000 en transacciones y otros 2.000 a través del turismo. A la vista de este antecedente, los responsables de la candidatura de Madrid 2020 tienen más que claro que, en un momento como el actual, los Juegos pueden ser también una buena palanca para la recuperación económica española.

Crecimiento del PIB

El informe sobre impacto económico que ha elaborado la auditora PWC asegura que los Juegos tendrían un impacto económico cercano a los 4.000 millones de euros en el PIB, que generaría 83.000 puestos de trabajo a tiempo completo y atraería a 800.000 visitantes adicionales para España con un gasto estimado de unos 670 millones de euros. Este incremento de la actividad económica y del empleo se traduciría a nivel tributario en un aumento de la recaudación de unos 1.200 millones de euros. A nivel de proyección internacional, la organización calcula que el impacto equivaldría a una inversión de casi 750 millones de euros en campañas internacionales de comunicación.

El Ayuntamiento de Madrid va más allá y cree que el mero hecho de llevar varios años en la carrera por organizar tres Juegos –los de 2012, 2016 y 2020– ya ha tenido un notable impacto positivo. Según recoge el reciente Barómetro de Economía de la capital titulado «Efectos derivados del proceso olímpico para la ciudad de Madrid», las inversiones ya realizadas con vistas a organizar anteriores Juegos, como la construcción de instalaciones deportivas como la Caja Mágica o la regeneración de la zona de Madrid Río con el soterramiento de la M-30, así como la mayor notoriedad aportada por la presentación de las sucesivas candidaturas, ya se han traducido en actividad y empleo para Madrid. Los 6.492 millones invertidos hasta ahora ya han provocado, según el informe, un incremento de la producción de la ciudad de 9.151,7 millones de euros, 3.768.1 millones de euros de valor añadido bruto y 75.536 empleos equivalentes a tiempo completo. Las sucesivas candidaturas, según el informe, habrían producido también unos ingresos adicionales de 504,1 millones a precios de 2012 para el periodo 2004-2012.

Si Madrid fuese elegida en Buenos Aires como sucesora de Río de Janeiro, los 2.296,3 millones de euros que tendría que invertir para completar las instalaciones e infraestructuras necesarias para los Juegos generarían en el periodo 2013-2020 un incremento de la producción de 3.236,9 millones de euros, 1.332,8 millones de VAB y 26.717 puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo, según recoge el citado Barómetro.

Agregando los impactos positivos previos y posteriores a la celebración de los Juegos en el caso de que Madrid fuera la ciudad elegida para organizarlos en 2020, la carrera olímpica se traduciría, según los cálculos del Ayuntamiento, en un incremento de la producción efectiva de la ciudad de 18.954 millones de euros, del valor añadido bruto de 8.218,5 millones y en una generación de 168.893 empleos equivalentes a tiempo completo, lo que representa un 8,4%, un 7,1% y un 8,9% respectivamente de las cifras anuales de producción, VAB y empleo de la ciudad en 2011.