Boda de Rafa Nadal

Aciertos y errores en la boda de Rafa Nadal y Mery Perelló

¿Qué invitados fallaron con el 'dress code'?

Aciertos y errores en la boda de Rafa Nadal y Mery Perelló
Aciertos y errores en la boda de Rafa Nadal y Mery Perellólarazon

¿Qué invitados fallaron con el 'dress code'?

Tal y como se esperaba, Rafael Nadal celebró ayer en intimidad su matrimonio con Mery Perelló en el municipio mallorquín de Pollença. Aunque a estas horas seguimos deseando ver una fotografía de la pareja, sí que hemos podido atisbar el outfit de algunos de los invitados en el momento de subirse al autobús que los transladó a Sa Fortalesa, finca elegida por los novios para dar su “sí, quiero”:

Según el tenista David Ferrer, los novios no marcaron ningún dress code para la boda, de modo que los invitados tuvieron la opción de vestirse como quisieron. Aún con esta libertad, en las bodas y en eventos de carácter formal es necesario seguir ciertas reglas de etiqueta ya que no todo vale.

Como en este caso fue una boda de día la mayoría de las mujeres se decantaron por vestidos de cóctel cortos y los hombres por trajes con corbata. Hemos visto mucho vestido rojo para ellas y muchas corbatas a topos claros para ellos, pero también vestidos largos entre las mujeres, mucho color negro y algún accesorio fuera de lugar.

Maribel Nadal

Entre las mejores vestidas destaca la hermana del novio, espectacular con un vestido rojo de Rosa Clará Cocktail. La mallorquina vivió un día muy especial, ya que ella fue la encargada de presentar a Mary y Rafa hace más de catorce años.

Sandra Gago

La modelo ha demostrado que los vestidos camiseros con flores sí pueden ser adecuados para una boda de otoño. Un punto extra para ella es que repetía diseño, ya que fue el vestido que lució el verano pasado en la boda de su cuñado, el hermano de Feliciano López.

Sandra llevó un vestido midi de Carolina Herrera acompañado de un cinturón verde de raso como el que lució hace unos días Su Majestad la reina Letizia. Pura tendencia.

También verde era la corbata que llevaba su marido, el tenista Feliciano López, que desde que está con Sandra viste mucho mejor (no me quito de la retina su boda con Alba Carillo, cuando combinó un chaqué gris con una camisa ejecutiva a rayas azules).

Para el enlace de su amigo, Feliciano eligió un traje azul eléctrico totalmente actual de la sastrería Just One con chaleco a juego. Algún día alguien tendrá que explicarme porqué le gustan tanto los chalecos a este hombre.

Marta Tornel

Tan solo la mujer de David Ferrer se atrevió a lucir una vistosa pamela de Mimoki. Aunque su look era elegante y otoñal, quizá el tamaño de la pamela era un poco excesivo. A la hora de comprar este accesorio hay que seguir siempre una regla de oro: las alas de la pamela nunca deben sobresalir del ancho de nuestros hombros.

Su conjunto con un vestido berenjena espectacular perdió puntos con un maquillaje con demasiados brillos.

Carolina Cerezuela

La presentadora y cantante se presentó al enlace con un vestido firmado Ana Torres de largo midi, rojo y de raso. Quizá el escote entallado en V era un poco excesivo para una boda, pero fue un atuendo muy acorde a la personalidad rockera y femenina de Carolina.

La cantante y su marido, Carlos Moyà, llegaron tarde a la boda y esto se notó en el ex tenista... peinarse un poco no le hubiera hecho mal.

Carlos Costa

El representante de Rafa Nadal, con traje y corbata negra, parecía ir mejor vestido para un funeral que para la celebración de una fiesta. Tan solo el pañuelo claro rompía la tristeza del conjunto.

Y es que el negro es uno de los colores a priori prohibidos en una boda (al igual que el blanco, por estar reservado a la novia). Sin embargo, la pareja del multimillonario Richard Mille sucumbió también a la elegancia del total black, confundiendo una boda con un evento de gala nocturno. Hasta el bolso era negro.

Juan Mónaco

En la parte baja de la tabla encontramos al ex tenista argentino Pico Mónaco, quien acudió a la boda de su amigo como si viniera directamente de otra fiesta: sin corbata, con la camisa desabrochada y luciendo gafas de sol. Punto y aparte tuvieron sus pantalones tobilleros (recuerden que era una boda otoñal) y sus mocasines marrones y sin calcetines. Cuánto daño ha hecho el fashionismo en la vida de algunos.