Fran Rivera: «Le he dado el pésame a Eugenia»

Fran Rivera apareció sonriente y relajado, sabedor de que el negocio que acababa de inaugurar será un nuevo atractivo turístico para Sevilla. Sin embargo, la pregunta sobre su ex suegra, la Duquesa de Alba, fallecida la pasada semana, rompió esa alegría que se manifestaba en su rostro. La ciudad aún no se había recuperado de la emotiva despedida que le brindó a su Duquesa, volcada siempre con la capital hispalense y sus tradiciones. La ausencia más comentada en su funeral fue la de su ex yerno Fran, que se encontraba en Acapulco junto a su mujer, Lourdes Montes. Sí regresó de forma precipitada su hermano Cayetano, que también estaba en México con Eva González. Él sí quiso acudir a la catedral sevillana para mostrar sus respetos a los Alba, destrozados por la muerte de la aristócrata. Fran prefirió quedarse en tierras mexicanas, a pesar del duro trance que vivió su hija Cayetana, visiblemente afectada durante la despedida a su abuela.

Ayer la expectación fue máxima en la apertura de su ansiado negocio, el mercado gourmet de la Lonja del Barranco, un establecimiento con más de veinte puestos que conjuga la innovación gastronómica con la tradicional cocina andaluza. Con bronceado caribeño y pañuelo en la americana, Fran mostró su extrañeza por los comentarios surgidos por su ausencia en el funeral, aunque en ningún momento entró a valorar la figura de Doña Cayetana, con la que en los últimos años se había distanciado al reclamar la custodia de su hija en los tribunales. «Le he dado el pésame a Eugenia», reconoció, no obstante, en referencia a su ex mujer, con la que no mantiene ningún tipo de relación, tal y como dijo en el programa de Risto Mejide. «Yo he estado pendiente de mi hija», aseguró, justificando que estaba «en el cumpleaños de un amigo», un evento «organizado desde hace mucho tiempo». «Hay que ser coherente con las situaciones y con uno mismo», señaló refiriéndose al nulo trato que mantenía con la Duquesa. «Mi sitio no era ése y era de sentido común que no acudiera», sentenció. A diferencia de Fran, Genoveva Casanova y María Eugenia Fernández de Castro, ex nueras de Doña Cayetana, sí estuvieron consolando a la familia en este duro trance. De hecho, acompañaron al féretro desde el mismo Palacio de Dueñas, donde falleció.

Pero Fran no quería que nada empañara su día. Recorrió los puestos del mercado junto al alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, gran amigo que los casó a él y a Lourdes el año pasado en secreto en el Ayuntamiento. Además, Zoido ha hecho todo lo posible para que el mercado sea hoy una realidad. En la inauguración, el empresario aseguró que las instalaciones «son fruto del trabajo y la ilusión», un coqueto edificio industrial totalmente reformado y ubicado en pleno corazón turístico de Sevilla, junto al puente de Triana y el Paseo Colón. «No habríamos llegado aquí sin la ayuda del Ayuntamiento», dejó claro, no sin antes remarcar que el proyecto lleva aparejada la contratación de 130 personas, más otros 400 empleos indirectos.

Después del largo camino recorrido –al concurso público también se presentó un proyecto liderado por Sergio Ramos y José María Manzanares–, Fran aseguró que «ya está el toro en la plaza y ahora hay que torearlo». Por su parte, Zoido afirmó que con esta iniciativa «se recupera este espacio emblemático» y valoró su apuesta por el empleo, ya que «muchas personas han encontrado aquí su proyecto de vida». También destacó la «calidad» del proyecto y su incorporación a la oferta turística de la ciudad.

Alianza con Carlos Herrera

Un total de nueve socios se han unido para reformar y explotar el complejo. Fran Rivera y el periodista Carlos Herrera son las cabezas visibles, pero también hay abogados y empresarios. Afrontan una inversión que supera los dos millones de euros, y el canon anual que deberá pagar la sociedad al Ayuntamiento asciende a 230.000. El nuevo espacio cuenta con una gran variedad de bares y restaurantes, con veladores en el interior y también en la zona exterior más cercana al río Guadalquivir. La oferta de productos se irá adaptando, tal y como apuntó Fran, en función de la época del año. Por ejemplo, en Navidad habrá productos típicos de esta fiesta, al igual que en Semana Santa o durante la Feria de Abril, de forma que el mercado «se acompasará a los tiempos de la ciudad».