Francisco Rivera: «Me hubiera hecho mucha ilusión que fuera un niño»

Francisco Rivera y su esposa, Lourdes Montes, serán padres de una niña en agosto, y la llamarán Carmen, en homenaje a Carmina Ordóñez.

Francisco Rivera y su esposa, Lourdes Montes, serán padres de una niña en agosto, y la llamarán Carmen, en homenaje a Carmina Ordóñez, la madre del torero, quien asegura que «estoy deseando que nazca mi hija, verle la carita y cogerla en brazos. Se me está haciendo muy larga la espera, el embarazo de Lourdes parece eterno, y mira que ha sido bueno, pero mi mujer comienza a sentir ya demasiadas molestias. Hace demasiado calor, y, sin embargo, es una jabata, lleva muy bien su estado. Sigue trabajando todos los días, va a su estudio de diseño, está preparando la nueva colección de ropa de invierno... Es que no para, y yo la cuido lo mejor que puedo».

–¿Sientes la misma ilusión que cuando vino al mundo tu hija Cayetana?

–Claro. Tener un hijo es maravilloso. Lo que sí que estoy es algo nervioso por la espera.

–¿Es un bebé muy buscado?

–Muy buscado y muy deseado, el fruto de un amor muy grande. Y una bendición de Dios.

–¿Lourdes tiene antojos?

–Una noche a las dos de la mañana me pidió un plato de lentejas.

–¿Se lo llevaste?

–Se quedó con las ganas...

–¿Cómo afrontas esta nueva paternidad?

–Muy ilusionado. Si todavía estoy para ejercer de torero, también para bregar como padre de un bebé.

–¿Qué comenta Cayetana...?

–Está muy feliz, con muchas ganas de que nazca su hermanita.

–¿No tendrá celos...?

–Seguro que no. Va a ser una segunda madre para la niña. Y ya nos dice que está concienciada para cuidarla mucho. A sus quince años, Tana es más mujer que niña... Me gustaría que estuviera más tiempo conmigo siempre. La necesito todos los días de mi vida.

–¿Llamar Carmen a tu futura hija es un homenaje a tu madre?

–Sí, es un buen homenaje a mi madre. Pero la negociación ha sido dura, porque Lourdes quería que la llamáramos Catalina, mi hija Cayetana, prefería Jimena, y yo Carmen. Y hoy brindo porque mi futura hija Carmen nazca muy bien y el parto sea cortito. No sé dónde me pillará, pero, esté donde esté, saldré corriendo para estar al lado de Lourdes en ese día tan especial. Porque tengo varias corridas y no es aconsejable torear sabiendo que tu mujer está dando a luz. No me perdería ese momento tan feliz por nada del mundo.

–Rezas antes de enfrentarte al toro. ¿Lo harás en el quirófano mientras nazca tu hija?

–Estaré muy concentrado para no desmayarme, ja, ja, ja.

–¿Se te da bien cambiar pañales?

–Muy bien, no lo he olvidado.

–¿No hubieras preferido que viniera un hijo varón?

–Me hubiera hecho mucha ilusión tener un hijo, para qué nos vamos a engañar. Pero disfruto tanto con mi hija Cayetana, porque nos gusta a los dos lo mismo, que tener otra niña sigue siendo una bendición.

–¿Descartas una tercera paternidad?

–No, porque me gustaría tener más hijos con Lourdes.

–¿Ha habido reconciliación con tu hermano Kiko?

–Está todo bien. Pero creo que los temas familiares hay que tratarlos dentro de casa y no fuera.

–¿Te has interesado por la situación carcelaria de su madre, de Isabel Pantoja?

–Kiko me ha dicho que su madre disfrutó mucho en su primer permiso, y poco más.

–Está a punto de ser padre de una niña, igual que tú.

–Ya le he felicitado por su próxima paternidad. Que mi hija Carmen tenga una prima de su edad es muy bueno.

–¿Tienes la intención de continuar toreando o ésta es la temporada de tu despedida definitiva?

–Aún no lo he decidido, aunque , la verdad, mi intención al regresar a los ruedos fue celebrar mis 20 años de alternativa como torero en la plaza. Ya veremos si sigo...

–¿Lourdes y Cayetana no te piden que te retires?

–Las dos respetan mis decisiones, saben que el toreo es mi vida y no me piden que lo deje. Pero es evidente que toreo mucho menos que antes.

–Otro de tus hermanos, Julián Contreras, ha dicho que no tenéis el menor contacto...

–Es un tema muy personal y no voy a hablar de ello.

–¿Le controlas los «novios» a Cayetana?

–Confío mucho en ella, no hace falta controlarla. Le hemos inculcado una serie de valores y sabe perfectamente cómo tiene que actuar en la vida. Y si se tropieza o se equivoca, seguro que es capaz de levantarse sin problemas.

–Hoy toreas en Estepona junto a tu hermano Cayetano.

–Me siento muy bien con él en la plaza. Me gusta mucho que compartamos cartel. Es un gran torero, me encanta cómo torea, e incluso que nos piquemos en el ruedo... de una manera sana.