Galerias

Más de 700 estrellas bajo la cúpula acristalada en Cibeles

Cientos de representantes del mundo de la política, la cultura, la economía, el deporte, la ciencia y la comunicación asistieron a la celebración que tuvo lugar en el Palacio del Ayuntamiento

Los Reyes, junto a Silvio González(6i), José Crehueras (1d) y algunos de los rostros más conocidos de Antena 3
Los Reyes, junto a Silvio González(6i), José Crehueras (1d) y algunos de los rostros más conocidos de Antena 3larazon

- Tres palabras brillaban bajo la cúpula acristalada de la Galería de Cristal: alegría, emoción y pasión, en rutilantes neones. Y ésas fueron las sensaciones que transmitió la gala del XXV Aniversario de Antena 3. Tanto dentro como fuera del recinto. A las puertas del Palacio de Cibeles decenas de fans esperaban ansiosos el autógrafo de las estrellas de la cadena. Los más osados pedían un «selfie». La acera de la calle Alcalá se llenó de globos, de tal forma que todos los viandantes fueron partícipes de la celebración de 25 años de televisión privada en España.

Dentro de ese cúmulo de buenas sensaciones no faltó el sentido del humor. Susanna Griso y Matías Prats, dos de los rostros más reconocidos de la cadena, fueron los encargados de conducir el acto. Y empezaron fuertes, a base de cariñosas pullas. Con el distintivo de Antena 3 y el eslogan «25 años emocionando» de fondo, Prats presentó a todas las autoridades con su seriedad habitual. «Parece el inicio de un telediario», bromeó, mientras Griso le recordó que se había «olvidado» del ministro de Industria. Ninguno desveló su edad, pero sí el tiempo que llevan trabajando para la cadena de San Sebastián de los Reyes: 17 años. «Pensé que llevaba más, pero son los mismos que Susanna», dijo Prats, si bien Griso le respondió que ella los «llevaba mejor».

Ambos tuvieron un cariñoso recuerdo para José Manuel Lara, presidente del Grupo Planeta y ausente en la celebración, al que mandaron un fuerte abrazo. «Ha sido nuestra proa, nuestro timón y nuestro ariete ante problemas y dificultades», afirmó el presentador de los telediarios del fin de semana. Los asistentes, entre los que se encontraban antiguas caras de la casa como Ana Rosa Quintana y Nieves Herrero, rompieron en una gran ovación en homenaje a uno de los pioneros de la televisión en España. A continuación, Susanna Griso dio la palabra a Silvio González, consejero delegado de Atresmedia, al que definió como un «corredor de fondo». No en vano, la presentadora de «Espejo Público» aseguró que han llegado a estos 25 años «en muy buena forma».

Los asistentes pudieron disfrutar de un cumpleaños de enormes proporciones, una gran fiesta en la que los centenares de invitados transmitieron sus mejores deseos a la cadena homenajeada a través de dedicatorias personalizadas digitales que podían verse proyectadas en la pantalla principal. Igual que hicieron Don Felipe y Doña Letizia a su llegada al Palacio de Cibeles. Todo ello presidido por el logotipo de la cadena que, durante estos días, ha cumplido sus bodas de plata. «Por otros 25 años, siempre con transparencia», escribió Cristina Pedroche, en referencia al conjunto que lució en la última retransmisión de Nochevieja en LaSexta. La colaboradora de «Zapeando» se quedó corta en comparación con otros invitados, que desearon que Antena 3 cumpliera, al menos, cien años de emisión más, como en el caso del actor Fernando Andina. «Muchos de mis momentos de televisión favoritos me los habéis dado a lo largo de estos 25 años tan emotivos. Gracias y que cumplas muchos más», escribió por su parte Frank Blanco, presentador y «jefe» de Pedroche en el espacio de LaSexta. «Doce años de mi vida en esta casa... y los que quedan», deseó María Garralón, la emblemática agente María de la Encarnación de «Farmacia de Guardia».

El protocolo marcó un antes y un después de la fiesta. Y es que, una vez acabado el acto y las presentaciones, los invitados se soltaron: Carlos Latre hablaba distendidamente con José Oneto, Esperanza Aguirre charlaba con Javier González Ferrari... Incluso algunas de las invitadas no dudaron en deshacerse de los tacones. Ya sobre las 22 horas, el Palacio comenzó a vaciarse. Y es que, al día siguiente, había que volver a maquillaje, a peluquería para ponerse delante de las cámaras con el reto de seguir emocionando a la audiencia al menos 25 años más.

.