Ortega Cano, de figura del toreo al olvido

El diestro volverá a los ruedos el 26 de agosto para sustituir a Morante, pero la gente está devolviendo sus entradas tras enterarse del cambio en el cartel.

Desde que se fue «la más grande», todo se ha desmoronado en el clan de los Mohedano Jurado. Y, por supuesto, también para José Ortega Cano. ¿Quién se iba a imaginar el paso del diestro por prisión? Rocío no lo hubiera imaginado ni en sus peores pesadillas, como tampoco la discordia entre su familia, los problemas de José Fernando con las drogas o las artimañas de su marido para protagonizar nuevas exclusivas.

Lejos queda la figura del toreo de la que un día se enamoró la chipionera. Hace mucho que José Ortega Cano dejó atrás sus días de gloria. A pesar de que se ha retirado en más de una ocasión, el diestro no se da por vencido. El próximo 26 de agosto volverá a los ruedos en la localidad madrileña de San Sebastián de los Reyes, aunque asegura que en esta ocasión es para «cortarse la coleta» definitivamente.

José espera que sea una tarde de lo más emocionante. La ilusión del torero es que sus hijos sean los encargados del ritual. El cartagenero quiere rodearse de los suyos en un día tan especial, por lo que su deseo expreso es que le acompañen su mujer, sus hermanos y sus tres hijos. Por lo tanto, José Fernando saldrá del centro psiquiátrico donde recibe terapia para asistir a la corrida.

Pero, como ocurre hasta en los mejores cuentos, no todo es de color de rosa. La vuelta del diestro se ha visto salpicada por comentarios detractores hacia su persona. Son muchos los que aseguran que el torero no se encuentra en condiciones físicas para enfrentarse al toro con profesionalidad. Sin embargo, él mismo lo ha desmentido, afirmando que es un hombre sano, que ama el deporte y con un espíritu joven.

El diestro cartagenero se enfundará el traje de luces para reemplazar a Morante de la Puebla, que renunció su retirada hace unos días. Esto ha levantado ampollas entre los aficionados que tenían su entrada comprada. Indignados, muchos de ellos han devuelto sus entradas tras enterarse del cambio en el cartel. La causa de la devolución es que piensan que Ortega Cano no está a la altura, ni merece la pena el precio del billete por ver torear al viudo de Rocío Jurado. Ha pasado de ser una gran figura a ser rechazado por los amantes del mundo del toro.

Tal vez sea por cumplir su sueño de verse en el ruedo por última vez, por necesidades económicas o por su enfermiza adicción a mantenerse en el ojo del huracán mediático. Sea por el motivo que sea, José está tremendamente ilusionado con su vuelta, en la que esperamos que no tenga ningún altercado.