Salvador Sobral, conectado a un corazón artificial

El intérprete sigue a la espera de un órgano compatible para realizarle el trasplante.

Casi dos meses después de anunciar su retirada «indefinida» del mundo de la música por sus graves problemas de salud, Salvador Sobral sigue a la espera de un órgano compatible para realizarle el trasplante de corazón. El ganador de la última edición de Eurovisión continúa recluido en el Hospital de la Santa Cruz (Carnaxide, Lisboa), donde ha estado bajo observación médica constante desde mediados de septiembre y estable dentro de la gravedad de su cuadro médico.

Según el «Correio da Manhã», los doctores del cantante han decidido conectarlo a un corazón artificial importado de Estados Unidos que desempeña las funciones del órgano vital mecánicamente, garantizando circulación sanguínea normal y constante a Sobral. El objeto, cuyo valor ronda los 110.000 euros, se coloca fuera del organismo y es de uso habitual en casos como el del músico, ya que, al asumir gran parte del trabajo vascular, permite que el órgano biológico recupere algo de la fuerza perdida. El equipo médico de Sobral considera que puede salvaguardar la salud del joven durante los próximos meses, aunque señalan que no es de ninguna manera una solución permanente para sus problemas, que solo se resolverán con un trasplante.

Sobral se vio obligado a ingresar en el hospital pocos días después de su último concierto en el Casino de Estoril, donde lloró abiertamente mientras los espectadores le lanzaban mensajes de ánimo. Tras su ingreso, pasó el resto del mes en una unidad de cuidados intensivos debido a la degradación alarmante de su estado de salud. Sin embargo, hace unas semanas fue dado de alta de la UCI y pasado a una zona de enfermería, donde su familia le visita regularmente.

Optimista

A principios de esta semana el presidente de la Fundación Portuguesa de Cardiología, Manuel Carregeta, se mostró optimista en este sentido, confiando que se encontraría un donante de corazón «próximamente». En declaraciones a «TV Guía», el médico afirmó que «con las primeras lluvias se multiplican el número de accidentes de conducción, y de esta manera aumenta el número de corazones saludables disponibles». Además, agregó que «la esperanza media de vida de los jóvenes que se someten a trasplantes de corazón es de muchísimos años, y con el avance de la medicina puedo afirmar que, si todo corre como está previsto, Salvador no morirá por culpa de su corazón».