«Mr. Robot»: Jugando a ser Dios

«Lo que estoy a punto de contarte es sumamente clasificado, una conspiración más grande que todos nosotros. Ahí fuera hay un grupo de personas que gobierna el mundo en secreto. Estoy hablando de unos tíos que nadie conoce, de unos tíos invisibles, el uno por ciento que está por encima del uno por ciento de los que juegan a ser Dios sin permiso». Así se presenta Elliot Alderson, el protagonista de una de las producciones más sorprendentes del verano, «Mr. Robot». Elliot es un joven muy peculiar que por la mañana trabaja en una empresa de seguridad informática y por la noche se dedica a hacer cumplir la Ley en la red.

Como un justiciero moderno, Elliot persigue a distribuidores de pornografía infantil, hombres que engañan a mujeres y estudia el historial digital de aquellos que llegan a su vida. Hasta que sus cualidades como «hacker» son requeridas para un bien mayor: la destrucción de los poderosos empresarios que manejan los negocios más importantes del mundo. Este valiente ofrecimiento llega de parte del grupo de «hackers» autodenominado Fsociety, y dirigido por un hombre llamado Mr. Robot, que tras estudiar los pasos del joven Elliot decide que él es la persona que falta en su equipo para llevar a cabo con éxito su plan.

Pero Elliot no es un «hacker» común, ya que padece problemas mentales que le impiden relacionarse normalmente con la sociedad y le sumen en profundas depresiones. Para superar estos problemas, Elliot consume drogas, una adicción que le ayuda a olvidar los miedos que le atormentan en los peores momentos. Pero que también le meterá en problemas. Solo en la ciudad de Nueva York, y con un círculo de amistades muy reducido, Elliot acude a la consulta de una terapeuta. Sin embargo, sus inseguridades le impiden sincerarse, algo que no le permite avanzar en el tratamiento de su enfermedad. A falta del capítulo final, que USA Network emitirá el jueves, «Mr. Robot» se ha revelado como una de las mejores series del verano y probablemente de la temporada. A través de Elliot, que se dirige al espectador, conseguimos adentrarnos en una peligrosa y apasionante aventura en la que la lucha contra el poder establecido provocada por el cansancio producido por las diferencias de clases y el creciente capitalismo deberá hacer frente a numerosas amenazas. La maléfica E Corp, un conglomerado de empresas que controlan buena parte del mercado mundial, Giddeon, el jefe de Elliot en Allsafe y los monstruos que alberga el joven en su mente serán algunos de ellos.

Escrita y dirigida por Sam Esmail, que llegó a la industria audiovisual en 2014 y se estrena con «Mr. Robot» en la televisión, del papel protagonista de Elliot Alderson se hace cargo el californiano Rami Malek, al que hemos podido ver en «The Pacific» y «24». Christian Slater como Mr. Robot, Ben Rappaport como Ollie y Michel Gill en el rol de Gideon Goddard son las caras más conocidas del reparto, en el que también encontramos al sueco Martin Wallström y a las jóvenes Carly Chaikin y Portia Doubleday. «Mr. Robot» ha logrado en nueve episodios el aplauso unánime, aunque no efusivo, de la crítica y el respaldo del público. Y el del universo hacker, que se felicita por la seriedad y profesionalidad de las tramas creadas por Malek.

- Lo mejor

Su valentía a la hora de proponer una historia compleja y original que se preocupa por ceñirse a la realidad de la «piratería» y no se inventa términos para facilitar la comprensión del espectador o el devenir de la trama. Y el excelente trabajo de Rami Malek.

- Lo peor

A veces los problemas mentales de Elliot pueden resultar excesivamente intensos o incómodos para el espectador. Para los que no manejan el lenguaje informático, algunos diálogos son demasiado técnicos. Y ciertas tramas que, por mucho que contribuyan a reflejar el estado de Elliot, sólo sirven para despistar.