Auditoría a la web municipal

Se van a cumplir los primeros cien días de Gobierno de Juan Espadas en el Ayuntamiento de Sevilla. El nuevo alcalde socialista pretende que la capital sea «una referencia de políticas públicas que apoyen la innovación y el emprendimiento» y asegura haber puesto en marcha un Gobierno «abierto y participativo». Una etapa «menos altiva y más operativa» que la de Juan Ignacio Zoido. «Acordar para construir», reiteró ayer en el desayuno informativo organizado por Europa Press. El principal anuncio, en cualquier caso, versó sobre unas ordenanzas fiscales que darán que hablar. Espadas anunció la congelación del IBI en 2016, pero sólo a los inmuebles de uso residencial. Y la puesta en marcha de un «crédito fiscal» a las empresas que amplíen su plantilla media el próximo año como medida para incentivar el empleo.

Espadas explicó que se usarán ventanas de progresividad que permite la ley y que los inmuebles que agrupan los valores más elevados en usos no residenciales no tendrán congeladas las cuotas de 2015. Se exigirá un mayor esfuerzo a los grandes contribuyentes, algo que se achaca a la caída en seis millones de los ingresos estatales.

Desde el PP se lamentó la intención de subir los tributos a las empresas, algo «contradictorio» con el impulso de la economía, y el concejal Gregorio Serrano abogó por continuar una reducción de la presión fiscal. «Nuestro compromiso era no subir impuestos, tasas o precios públicos en ningún caso, y así lo reflejaba el programa electoral», precisó.

Espadas adelantó que las tasas no crecerán por encima del IPC, salvo algún caso concreto en el que el coste real del servicio no queda cubierto (como las casetas de la feria), e implantará medidas para fomentar el empadronamiento de la ciudad y parar el descenso de habitantes, al margen de ayudas sociales y medidas de solidaridad con la población desprotegida, con bonificaciones a la vivienda social, garantía de suministro de agua y dispensa de la tasa de basuras a las familias en riesgo de exclusión, entre otras cosas.

Poco adelantó sobre futuros proyectos. Nada nuevo sobre el Metro. Derogado el convenio de Zoido para dar uso a los suelos Altadis, sólo expresó el deseo de que sea un centro de innovación tecnológica que sirva de «icono» de Sevilla. El proyecto empresarial «Sevilla Park» no contará hasta final de mes con un pronunciamiento sobre su viabilidad. Tampoco avanzó nada sobre el futuro económico de Mercasevilla y sólo deslizó que Zoido ha gestionado «bastante mal» los asuntos judiciales, porque hay ocasiones en los que «la negociación es mucho mejor que un pleito». Y en el horizonte, los presupuestos para 2016 y puntos de fricción seguros con sus aliados Participa Sevilla e IU.

Pero Espadas también se ha encontrado con algún escándalo. El «agujero de seguridad» en la web municipal que ha permitido durante meses el acceso a datos privados de los sevillanos utilizando simplemente un enlace de Google ha generado gran polémica.

Auditoría a la web municipal

La Fiscalía anunció ayer que «por ahora» no abrirá una investigación, a la espera de los resultados de las averiguaciones emprendidas por la empresa que confeccionó el sitio web. Aunque el Ayuntamiento atribuyó el problema a un «error» de Tecnocom, ésta asegura que no es «responsable de la gestión de seguridad» de la web de la Agencia Tributaria y que sólo se encarga del «desarrollo de contenidos». Mientras tanto, el portavoz de C’s, Javier Millán, que fue quien denunció la irregularidad, sospecha que el supuesto fallo en el cambio de protocolo de seguridad fue «intencionado», por lo que reclamó ayer una auditoría externa y urgente. El Consistorio respondió adelantando la auditoría de seguridad prevista para octubre a los próximos días, en los que se revisarán y reestructurarán los protocolos y responsables informáticos internos. Según el Gobierno local, Zoido realizó una modificación presupuestaria de 200.000 euros destinados a servicios informáticos para gastos electorales.