Cine español

La gala de los premios Goya hace necesario hablar del espectáculo que, sin duda, más público convoca en el mundo entero, ya sea en sala de un cine; en tu casa a través de un dvd; o viendo la programación de cualquier cadena de televisión, que tienen en el cine uno de sus grandes pilares. Tanto es así que, en España, como en otros países, las grandes cadenas producen buena parte de las películas de los últimos años. En España hay muchas personas, con cultura y relevancia, que dan por hecho que una película española es mala y que no le interesa a nadie. Para ejemplo el presidente Rajoy, que no tuvo ningún empacho en decir que no veía películas españolas. A veces la sinceridad a toda costa puede ser un insulto, en este caso, a la cultura. Lo cierto es que estas personas se están perdiendo grandes historias, con excelentes guiones, estupendas direcciones y magníficos intérpretes. Además, se equivocan al decir que no interesan a nadie. Hay hechos incontestables: en los últimos tres años, las películas más taquilleras han sido españolas, con más de 100 millones de euros de recaudación en España, más de 60 millones en otros países y más de 16 millones de localidades vendidas. Otro de los estigmas con los que carga nuestro cine son las ayudas estatales. Hagamos números. Para empezar, esas ayudas no son a fondo perdido. La cifra del 2016 no llega a 70 millones de euros. Sólo en IVA el Estado recupera más de 32 millones de euros. Sumemos los impuestos que pagan distribuidores, empresarios de locales, televisiones por sus programas de cine, dvd y los impuestos de todos los que participan en una película. La conclusión final es que el sr. Montoro hace un buen negocio. Por cierto, nunca se habla, ni se critican las ayudas al deporte, a los museos, al teatro, a las grandes orquestas –a mí todo fomento económico de estas actividades siempre me parecerá poco–. Otra cosa que me gustaría saber es ¿cuántos millones nos cuesta a los españoles la seguridad de la temporada de fútbol, con sus partidos de alto riesgo, que precisan miles de agentes? Nunca he visto ni a un solo agente en ningún cine de España, en todo caso seguridad privada. Disfruten del buen cine español y si no les apetece estarán en su derecho, pero no lo manden a la hoguera por puro sectarismo.