Díaz echa un pulso: o cierra la investidura el martes o elecciones

La presidenta de la Junta en funciones, Susana Díaz, dará una última oportunidad a la décima legislatura andaluza que no acaba de nacer. La socialista ha decidido coger las riendas de las negociaciones con los partidos con representación parlamentaria, con los que se reunirá en San Telmo –sede del Gobierno regional– entre los próximos lunes y martes por orden descendente con respecto al número de parlamentarios obtenidos el 22 de marzo. Es decir, el primero será el PP, que logró 33 diputados, y que tiene hora cerrada en la agenda: el lunes, a las 11:00. Le seguirá Podemos, con 15; Ciudadanos, con 9, que ya tiene también turno fijado, el martes a las 11:00 horas; y después IULV-CA, que arañó cinco parlamentarios. Cerrará con miembros de su grupo, el socialista.

Díaz mantuvo un primer encuentro con los líderes del resto de formaciones días después de los comicios autonómicos adelantados. Luego, dejó su investidura en manos de los negociadores de los distintos bandos, que no alumbraron la fórmula para entenderse. Ahora, la socialista vuelve a tomar la iniciativa para intentar desbloquearla antes incluso de que se conformen el 13 de junio los ayuntamientos, pero, fuentes del PSOE-A y del Ejecutivo andaluz apuntan a LA RAZÓN que esta ronda de conversaciones «será la última». Si no levantan su «veto» y no se llega a ningún tipo de acuerdo para que la oposición deje paso a la presidenta electa, «habrá que volver a las urnas», avisan las fuentes consultadas.

La propia Díaz ya advirtió, después de asistir a su tercera hilera de «noes» encadenados en el Parlamento el pasado 14 de mayo, de que si no había avances, volvería a dar la palabra a los andaluces o, dicho otro modo, la comunidad se vería abocada a otra convocatoria electoral en septiembre. De hecho, ése es el final previsto también en el Estatuto de Autonomía, si ningún candidato consigue la confianza de la Cámara.

Fuentes socialistas aseveran que su partido «no tiene ningún miedo» a volver a testar el pulso del electorado. Es más, creen que, de acuerdo a los sondeos internos que manejan, saldrían reforzados con respecto al 22-M, no así otras formaciones como el PP. Además, según la encuesta postlectoral del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), el 26,4% de los andaluces prefiere un gobierno en solitario de Díaz. Si bien, según ese mismo barómetro, sólo un 2% de los votantes de la región modificaría el sentido de su sufragio, de tener que reiterarlo, con lo que la situación del arco parlamentario más plural de la historia podría ser similar a la actual.

Díaz necesita una mayoría simple, es decir, más votos positivos que negativos para ser investida, con lo que le valdría con la abstención del PP o de Podemos más Ciudadanos (C’s). Hasta ahora, ése era el objetivo. Si bien, el líder andaluz de C’s, Juan Marín, planteó ayer: «Si aceptan todas nuestras medidas, diremos que sí a la investidura de Díaz». Tal vez lo facilite el hecho de que al partido de Albert Rivera parece valerle ahora con que la socialista se comprometa «por escrito» a pedir el acta de diputado a Manuel Chaves sólo si resulta imputado de un delito por el Tribunal Supremo en el «caso ERE». Con un «sí» de C’s, Díaz tendría mayoría absoluta.

El PP critica el «ultimátum» antes de «sentarse a la mesa»

El presidente del PP-A, Juanma Moreno, criticó que la presidenta de la Junta en funciones, Susana Díaz, haya «amenazado con repetir las elecciones» en Andalucía en el caso de que la próxima semana no se desbloquee su investidura, sin haberse sentado ni siquiera aún a la mesa de negociación. Moreno hizo este reproche a la dirigente socialista en su perfil de la red social Twitter, a través del que el popular quiso dejar claro que «los ultimátums no son la mejor forma de iniciar una negociación» y eso es lo que, a su juicio, Díaz y el PSOE han planteado «sin sentarse aún a la mesa», insistió. Para Moreno, la presidenta «no quiere gobernar ni llegar a acuerdos». Le reprochó que un mes antes de agotar el plazo legal para dialogar ya «amenace» con la posibilidad de otros comicios.