El nombramiento de la ex rectora que investigó a Errejón revoluciona las redes

Las únicas consejerías del nuevo Gobierno andaluz con competencias exclusivas en una materia son las de Sanidad, Educación y Cultura. Para dirigir las dos últimas, la presidenta Susana Díaz ha elegido a dos mujeres: la ex ministra Rosa Aguilar y la rectora de la Universidad de Málaga (UMA), Adelaida de la Calle, respectivamente. Dos apuestas que removieron a la oposición.

De la Calle provocó una inmediata reacción en Podemos. ¿El motivo? La UMA abrió un expediente disciplinario que aún colea al responsable de la Secretaría Política de la formación y «número dos» del partido, Íñigo Errejón, por incumplir supuestamente su contrato con el centro universitario como investigador. El nombramiento provocó incluso que la formación morada acuñara un nuevo concepto, el de «persecuciones giratorias», en lugar de las históricas «puertas giratorias».

En el perfil oficial de Podemos Andalucía en Twitter se vehiculó la crítica a través de un tuit en el que se podía leer: «La rectora que investigó a @ierrejon para hacerlo un ‘caso’ mediático... nueva consejera de Educación. Casualidad», se preguntaban, para añadir la etiqueta #PersecucionesGiratorias, que se convirtió rápido en «trending topic» o tendencia.

A la nueva titular de Educación se refirió también en la misma red social el secretario de Organización de Podemos, Sergio Pascual, quien negoció con el PSOE la investidura de la presidenta. Atribuyó el cargo a un «premio» por su «independencia» como rectora de la universidad. Pascual añadió a LA RAZÓN, que la consejera «comienza con mal pie y dejando muy claro que su reparto de lealtades no prioriza la institución sino al dueño del ‘dedazo’». En apariencia ajena al polvo levantado en las redes, ilustrada con montajes gráficos, De la calle aseveró a Ep afrontar la nueva etapa con ganas de «devolver a Andalucía algo de lo mucho que ha hecho» por ella.

Para coger las riendas de la prometida en campaña Consejería de Cultura, Díaz ha repetido el fichaje estrella de José Antonio Griñán. A Aguilar la «conocen bien» en IULV-CA, socio de gobierno de los socialistas en la anterior legislatura. Aguilar militó en la federación con la que llegó a ser alcaldesa de Córdoba. Luego inició un viraje hacia el PSOE, cuando, ya fuera de IU, Griñán la introdujo en su Gobierno en 2009 como consejera de Obras Públicas. Después, recibió otra llamada: la de José Luis Rodríguez Zapatero para dirigir el Ministerio de Medio Ambiente. Tras esa etapa y otra como diputada nacional por el PSOE, ahora hace el viaje a la inversa: Madrid-Sevilla. Fuentes de IU admitieron haber acogido la noticia con «sorpresa». Su líder en la comunidad, Antonio Maíllo, aseveró «no entender» su papel en el Ejecutivo. «Cuando todo está cambiando en el país, vuelve Rosa Aguilar a Andalucía», ironizó.