Herrero propone que lo sustituya el presidente de la patronal malagueña

El presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), Santiago Herrero, estudia no presentarse a la reelección en la asamblea general electoral prevista para el mes de enero y que la Confederación convocará en el seno de la junta directiva y comité ejecutivo que se celebrarán hoy.

Fuentes empresariales han indicado a Europa Press que este jueves se celebrarán comité ejecutivo y junta directiva, con carácter ordinario, aunque entre sus puntos del orden del día figura la convocatoria de asamblea general electoral, algo previsto, toda vez que dicha asamblea se celebra cada cuatro años.

La asamblea electoral está previsto que se celebre en enero y en ella Santiago Herrero pretende no presentarse a la reelección, a pesar de que sí podría seguir y presentarse de nuevo, según las normas de la CEA.

Asimismo, esas mismas fuentes han apuntado que como sucesor de Herrero se perfila el actual presidente de la Confederación de Empresarios de Málaga, Javier González de Lara, aunque recuerdan que ahora se tendría que abrir un plazo para la presentación de candidaturas. Su sustituto contaría con el apoyo del actual presidente, que ocuparía el cargo hasta formalizarse el relevo.

Santiago Herrero es presidente de la CEA desde el 21 de febrero de 2002, cuando accedió por primera vez a la presidencia, en sustitución del desaparecido Rafael Álvarez Colunga, y fue reelegido en 2006 y en 2010.

Herrero, natural de Sevilla, ha dedicado toda su vida profesional a las organizaciones empresariales y es miembro de distintos consejos de administración de empresas andaluzas. El presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA).

Las fuentes consultadas han achacado a la edad –tiene más de 65 años– la decisión de Santiago Herrero y descartan que sea por otros motivos.

En cualquier caso, la patronal andaluza no atraviesa su mejor momento por la caída de los ingresos tanto por vía de ayudas de las instituciones, sobre todo de la Junta de Andalucía, como por las cuotas, y el año pasado tuvo que acometer una regulación de empleo que redujo prácticamente a la mitad su plantilla tras cerrar 2012 con un déficit de 12,4 millones de euros.

También emprendió una reforma de su modelo organizativo mediante nuevas vías de ingresos como la comercialización de su sede en la Isla de la Cartuja en Sevilla para alquilar algunas de sus dependencias para la organización de actos, y la prestación de servicios profesionales, en colaboración con expertos y consultores, entre otras iniciativas.

Además, a ello hay que sumar varios frentes judiciales abiertos. El primero de ellos es la denuncia presentada por seis constructores contra Herrero, al que acusan, junto a otros siete directivos, de una estafa de 591.000 euros en la construcción de VPO. La deuda se habría producido por trabajos que los seis contratistas hicieron y no cobraron en una promoción de 583 viviendas de protección oficial de Sevilla Este. Paralelamente, la Sociedad de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb), conocida como el banco malo, también ha denunciado ante la fiscalía a la Fundación para el Desarrollo del Sur de Europa, perteneciente a la CEA, por un desfase de entre 12 y 14 millones en dicha promoción de viviendas.

A todo ello hay que unir la investigación abierta por el juzgado de Instrucción 6 de Sevilla por las facturas falsas de UGT y el presunto desvío de las ayudas para la formación. El propio sindicato, en su intento de desviar la atención o sacudirse la atención mediática, ha señalado a otras organizaciones como CC OO o la propia CEA, que han recibido importantes subvenciones en esta materia y en otras gracias a los Acuerdos de Concertación Social suscritos.