IU se pliega al PSOE y rechaza una comisión sobre Invercaria

Izquierda Unida votará mañana en el Parlamento en contra de la solicitud, por parte del PP-A, de crear una comisión de investigación sobre Invercaria. La coalición de izquierdas tenía la llave para que la iniciativa prosperase. El PSOE, de entrada, se opone. Así lo aseguró ayer a EP el portavoz del grupo parlamentario de IU-CA, José Antonio Castro. Su formación es «bastante remisa» a la propuesta al considerarla «una estrategia desestabilizadora y partidista». En su lugar, IU-CA va a proponer una comisión de investigación sobre la financiación de los partidos andaluces, en un intento de introducir el escándalo de los sobresueldos que sacude al PP. «Como pensamos que el problema de fondo parece ser la posible financiación irregular de los partidos, y el PP dice que Invercaria puede apuntar a eso, vamos a plantear una comisión de investigación de todos los partidos políticos en la que solicitaremos los papeles de todos».

Hasta ahora IU no había dicho de forma rotunda que se opondría a investigar en el Parlamento el caso Invercaria, aunque después de la experiencia fallida de la comisión de investigación del caso de los ERE –que se cerró sin dictamen final–, la coalición de izquierdas dio a entender que sería inútil repetir el experimento. El coordinador general de IU-CA y vicepresidente de la Junta, Diego Valderas, siempre ha respondido con evasivas y con la misma frase: «Los olivos se cavan de uno en uno».

El «caso Invercaria» lo instruye el juzgado número 16 de Sevilla, que rastrea los movimientos de 40 empresas que recibieron ayudas de la sociedad de capital riesgo dependiente de la Consejería de Innovación de manera arbitraria. La espoleta del caso fue un informe de la Cámara de Cuentas relativo a 2009 que detectó numerosas irregularidades. Posteriormente la Fiscalía Superior del TSJA detectó indicios claros de delito y la Fiscalía Anticorrupción pidió al juzgado que imputase por malversación a cinco personas, entre ellas el ex presidente Tomás Pérez Sauquillo, que gastó casi 25.000 euros en comidas de forma injustificada.

Recientemente declararon ante la Udyco dos ex presidentes, un sobrino de Felipe González, Juan María González, y Laura Gómiz. El nombre de Gómiz se hizo célebre al aparecer unas grabaciones en las que obligaba a un antiguo directivo, Cristóbal Cantos, a montar expedientes falsos. El directivo se opuso y denunció el caso. Gómiz le confesó que «si estuviera comprometida con la ética no trabajaría en esta organización». El PP ha etiquetado el caso como el «segundo fondo de reptiles» apoyándose en que 60 millones han escapado al control.