Sevilla

La ampliación del Metrocentro contará con cuatro paradas y llegará a Nervión en 2020

El proyecto completo costará unos 49 millones de euros

El alcalde, Juan Espadas, ofreciendo la rueda de prensa
El alcalde, Juan Espadas, ofreciendo la rueda de prensalarazon

El área de Movilidad del Ayuntamiento de Sevilla ha finalizado ya el plan especial de la plataforma reservada del metro ligero en superficie entre San Bernardo y Santa Justa, que será remitido a Urbanismo para su aprobación inicial en Junta de Gobierno Local en marzo y que recoge un trayecto, con cuatro nuevas paradas, que discurre por las avenidas de San Francisco Javier, Luis de Morales y Kansas City hasta la estación de trenes.

En rueda de prensa, junto a los concejales delegados de Seguridad y Movilidad, Juan Carlos Cabrera, y del Distrito Nervión, Inmaculada Acevedo, y el director general de Movilidad, José Lorenzo, el alcalde hispalense, el socialista Juan Espadas, ha explicado que el proyecto completo costará unos 49 millones de euros, que serán financiados igual que el tramo de Metrocentro que ya funciona, con un plan de financiación a largo plazo que incluye los ingresos que irá generando.

De esa cantidad, 35 serán para el trayecto entre San Bernardo y Nervión --27 millones para la obra y 7,5 millones para la adquisición de material, un montante que recoge el desarrollo de un paso subterráneo a la altura de Ramón y Cajal --desde la Facultad de Económicas hasta el Edificio Hermes--, más caro que si fuera en superficie, pero “la mejor opción” para reducir el impacto sobre la circulación y facilitar el giro del tranvía.

La finalización del proyecto hasta Santa Justa rondará los 13 o 14 millones de euros y su licitación se hará de modo paralelo a la ejecución de la obra del primer tramo. De hecho, Lorenzo detalla que la ejecución de esa segunda fase puede ser más rápida porque ya se cuenta con todo el planeamiento necesario y la evaluación ambiental tramitada, por lo que la licitación del proyecto podría hacerse en unos dos meses y estar terminado a mitad del próximo mandato.

Espadas explica que el plan especial de Movilidad estará aprobado en septiembre de forma definitiva, tras dos meses de exposición pública y de recogida de todos los informes pertinentes, por lo que las obras desde San Bernardo hasta donde se sitúa El Corte Inglés de Nervión podrán ser licitadas a final de año para que puedan comenzar en verano de 2019.

Así, tres de las cuatro nuevas paradas del tranvía podrían estar ya en funcionamiento antes de que termine 2020, teniendo en cuenta que las obras y pruebas previas a su puesta en uso durarán unos 18 meses. Éstas serían las de San Francisco Javier, a la altura de la calle Santa Joaquina de Vedruna; en la intersección entre la citada vía y Eduardo Dato, junto al centro comercial Nervión Plaza, y una tercera al lado de El Corte Inglés. La cuarta parada sería la que se colocaría en Santa Justa, en marcha en la segunda fase del proyecto.

“Vamos cumpliendo los plazos”, señala Espadas, que recuerda que existe una “leve demora” de dos meses ante el recurso inicial presentado por una empresa y el “retraso” de los informes de otras Administraciones para la elaboración del plan especial.

Destaca el desarrollo de un proyecto “estratégico”, con el que el tranvía prevé alcanzar entre siete u ocho millones de viajeros, duplicando la cifra actual. De hecho, el trayecto elegido finalmente, frente a las otras dos opciones que entraban por Buhaira --una hasta Pablo Picasso y otra hasta Eduardo Dato--, responde a dar servicio a mayores núcleos de población, ya que en la zona viven unas 35.500 personas, así como teniendo en cuenta los espacios comerciales existentes.

Este metro ligero, con una velocidad media de 21,5 kilómetros por hora y que alcanzará los 24 en el túnel, tendrá un trayecto de 2,16 kilómetros hasta Santa Justa que durará cinco minutos y medio, mientras que los 1,4 kilómetros que separan San Bernardo de Nervión se realizarán en poco más de tres minutos y medio. Discurrirá por el centro de la calzada, por lo que el arbolado que actualmente se encuentra en ese espacio será compensado y reforzado en los acerados del trayecto.

Esta alternativa de transporte desde Santa Justa permitirá ahorrar un 25 por ciento los tiempos de traslado a Plaza Nueva, reduce en 1,4 millones de kilómetros los desplazamientos de vehículos privados y producirá que se dejen de emitir 2.400 toneladas de CO2 al año, algo que también irá ligado a la reordenación de Tussam en la zona.

EL SUPERÁVIT DE 50 MILLONES, PARA TRANSPORTE

Al hilo de ello, preguntado por el empleo del superávit municipal, Espadas ha considerado que los 50 millones aplicables a inversiones “no es necesario e imprescindible que se emplee en esta infraestructura”, ya que está previsto que su financiación se haga como el tramo ya ejecutado.

Así, indica que, una vez que el Real Decreto lo apruebe, prevé destinarse este montante a distintas actuaciones de transporte público, aunque “se pueda proponer que una parte vaya para el tranvía”.