Cine

Sevilla

Los sonidos del miedo

«Un lugar tranquilo» se desarrolla en un futuro apocalíptico
«Un lugar tranquilo» se desarrolla en un futuro apocalípticolarazon

Que el miedo no es patrimonio exclusivo del cine de terror lo confirma el hecho de que en la actual cartelera andaluza haya al menos dos películas completamente ajenas a este género en las que el espectador puede llegar a sentir más miedo que en una película de terror al uso. «Alma mater» se estrenó hace dos semanas avalada por sendos premios del público en los festivales de cine de Berlín y Sevilla. Narra 24 horas en la vida de una familia refugiada en el interior de un piso en una ciudad de Siria. A excepción de un par de secuencias donde el terror se puede palpar, el cineasta belga Philippe Van Leeuw ha optado por transmitir el miedo de un modo muy intenso a través de los sonidos: helicópteros que sobrevuelan, disparos, ráfagas de ametralladoras, pasos que se acercan, golpes en la puerta, etc.

La francesa «Custodia compartida», estrenada la semana pasada, podría haber sido una película más sobre los conflictos surgidos tras una separación nada amistosa si no fuera por los excelentes minutos finales en los que se siente muy cercano el pánico que viven dos de sus protagonistas y que recuerdan a alguna célebre secuencia de «El resplandor». A propósito de este título de Stanley Kubrick, sólo por el brillante homenaje que le presta Steven Spielberg en «Ready player one», merecería la pena ver este más que entretenido trabajo.

También se estrenó la semana pasada una película adscrita al género de terror donde casualmente el papel del sonido es de notable relevancia. «Un lugar tranquilo» se desarrolla en un futuro apocalíptico en el que abundan criaturas terroríficas ciegas pero con el sentido del oído muy desarrollado. De nuevo es una familia la protagonista de esta historia en la que resultará clave el papel que juega una de sus hijas. Es, además, un magnífico ejemplo de cómo, cuando hay talento tras la cámara, con muy pocos elementos se puede construir una historia que atrape al espectador desde el minuto uno.