Ryanair cancela 14 vuelos en el arranque de la huelga en Andalucía

Los empleados de cabina, que protestan por el cierre de las bases de Canarias y Gerona, denuncian servicios mínimos que «rozan la ilegalidad»

Los efectos de la huelga de los tripulantes de cabina de Ryanair se están notando en Andalucía, con un total de 14 vuelos cancelados en el arranque de una protesta convocada para evitar que la aerolínea cierre las bases de Gran Canaria, Tenerife Sur, Lanzarote y Gerona. Estas cancelaciones se han efectuado en los dos aeropuertos de referencia de la comunidad autónoma: Sevilla y Málaga. El portavoz de USO-Ryanair en Sevilla, José Miguel Gallardo, confirmó a LA RAZÓN que el pasado domingo se suspendieron dos vuelos que cubrían la ruta Barcelona-Sevilla y ayer se anularon otros dos. El colectivo ha programado diez días de huelga en septiembre, concretamente las jornadas del 1, 2, 6, 8, 13, 15, 20, 22, 27 y 29 del mes. Los pilotos, por su parte, se sumarán a la protesta en la segunda quincena del mes, con cinco días de huelga.

Según aseguró Gallardo, la empresa alega que dichas bases «no son productivas», un extremo que negó el portavoz sindical, añadiendo que la intención es que «otra empresa del grupo opere dichas rutas a partir de enero, con un empeoramiento de las condiciones laborales de los trabajadores». De hecho, a los empleados de Canarias ya les ha llegado la carta de despido para el 8 de enero.

De otro lado, Gallardo lamentó que el Ministerio de Fomento ha establecido unos servicios mínimos «elevados», en algunos casos de hasta el 80 y el 90 por ciento «para silenciar en todo lo posible la huelga». Una circunstancia que «roza la ilegalidad». Un total de 500 trabajadores están afectados por los cierres anunciados, una estrategia que el colectivo considera que se desarrollará «a largo plazo», sobre todo si «sale victoriosa» de los procesos iniciados en Canarias y Gerona. «Si hacen un ERE a las bravas, posiblemente estos cierres afectarán a todo el país y se haga una refundación de la compañía, con peores condiciones laborales para los empleados de Sevilla, Málaga, Madrid y Barcelona».

La negociación con la empresa está abierta, aunque Gallardo subraya que «siguen planteando unas condiciones abusivas». Entre otras exigencias, plantean negociaciones en inglés y en Dublín, sede de la aerolínea. «Hace poco se celebró una sesión negociadora que duró nueve horas y no se consiguió ningún acuerdo. Todos los acercamientos han caído en saco roto». Junto a ello, el portavoz sindical denuncia que los empleados de cabina soportan «mucha presión». «Te llaman constantemente cuando estás enfermo, lo tienes que justificar todo al máximo y hay muchas exigencias en cuando a las ventas». Sevilla y Málaga son dos enclaves en expansión y no se prevé ningún cierre, aunque la política de la empresa es «muy volátil».