Fraude en los cursos de formación

«Un dictamen sin fecha, que sí se acotó en la comisión de los ERE»

La celebración de unas posibles terceras elecciones en diciembre añade presión sobre el PSOE, ya que Díaz puede ser señalada

El presidente de la comisión de investigación, Julio Díaz (C’s)
El presidente de la comisión de investigación, Julio Díaz (C’s)larazon

La celebración de unas posibles terceras elecciones en diciembre añade presión sobre el PSOE, ya que Díaz puede ser señalada.

Los cinco grupos con representación parlamentaria entregaron el pasado lunes 26 de septiembre sus conclusiones sobre la comisión de investigación parlamentaria sobre el fraude de los cursos. Todos los partidos, salvo el PSOE, señalaron la responsabilidad política de los ex presidentes Chaves y Griñán, mientras que PP, Podemos e IU apuntaron también a la actual jefa del Ejecutivo, Susana Díaz. A partir de ahora se abre un momento clave para que esta comisión, en la que han declarado 66 personas, llegue a buen puerto y no tenga el final truncado de la de los ERE del año 2012.

El presidente de la comisión de investigación, Julio Díaz (C’s), tiene que elaborar una ponencia síntesis con las aportaciones de todos los partidos. En 2012, el encargado fue Ignacio García (IU). Pero la diferencia con aquel momento es que el diputado de Ciudadanos tiene manos libres para manejar los tiempos, ya que los grupos –probablemente por olvido– no han cerrado esta vez un cronograma que indique el día en el que el dictamen sea sometido a votación en el Pleno del Parlamento andaluz. Conviene no perder de vista que en los tiempos de la comisión pueden cruzarse además eventualidades, como una tercera convocatoria electoral para el mes de diciembre.

El reglamento del Parlamento andaluz es muy escueto en cuanto a la organización de una comisión de investigación. No establece nada ni sobre los plazos ni sobre el modo cómo se debe elaborar una ponencia síntesis. Lo que sí recoge en su artículo 51 es que «las comisiones de investigación elaborarán un plan de trabajo».

La comisión de investigación de los cursos cuenta con un plan de trabajo, aprobado por todos los grupos, pero no determina nada acerca de la fecha tope del debate. La única fecha que existía en el horizonte era la de la entrega de las conclusiones, que finalmente se estiró una semana para dar cumplimiento a la petición de Podemos e IU.

En el caso de la comisión de los ERE fraudulentos del año 2012, los tiempos quedaron más atados. El día 27 de septiembre, justo después de producirse todas las declaraciones, los grupos acordaron un plan de trabajo con fechas muy precisas: la ponencia síntesis tendría que estar lista el 20 de octubre y el debate final se produciría coincidiendo con el Pleno de los días 24 y 25 de octubre. Posteriormente se produjo una reformulación de los tiempos para acompasarlos con el informe sobre los ERE que estaba elaborando la Cámara de Cuentas, por lo que el debate definitivo se emplazó para el Pleno del 28 y el 29 de noviembre de ese año.

Y así se produjo. Ignacio García entregó la ponencia el 16 de noviembre y el debate final fue el día 28, con el resultado que ya es conocido. No hubo acuerdo, ya que IU recogió en la síntesis que la máxima responsabilidad residía en el ex consejero José Antonio Viera, mientras que el PSOE apuntó más bajo (el ex director general de Trabajo Francisco Javier Guerrero) y el PP a la cúspide de la pirámide: Chaves y Griñán.

Ciudadanos tiene en este momento la misma patata caliente que tuvo en su día Izquierda Unida respecto a señalar o no a la presidenta de la Junta. Hay más grupos –tres– que ven responsabilidad política en la jefa del Ejecutivo, especialmente por el modo en el que gestionó la parálisis de las convocatorias de los cursos de formación. La última fue la de 2012 y hasta el año que viene no se reanudarán de manera efectiva. No obstante, hay una mayoría parlamentaria –PSOE y Ciudadanos suman 56 de los 109 escaños– que la libra de cualquier responsabilidad. Ciudadanos sólo señaló un «menoscabo social» por la parálisis de los cursos.

Por tanto, la almendra de la ponencia síntesis sólo es una: si C’s señala a Susana Díaz y de qué forma la señala. Por otra parte, Ciudadanos no tiene fácil mantener los equilibrios, toda vez que es la fuerza de apoyo del PSOE en el Parlamento, con quien suscribió un pacto de gobernabilidad explicitado en 72 medidas en junio de 2015.

Julio Díaz está inmerso en los trabajos preliminares de la ponencia síntesis, según señalaron a este periódico fuentes de esta formación. Sin embargo, según estas mismas fuentes, no hay ningún horizonte temporal establecido. La prioridad es hacer un buen trabajo y que finalmente no ocurra lo que ocurrió en los ERE. Esto es, cierre en falso y ausencia de dictamen. Julio Díaz señaló recientemente en una entrevista con Europa Press que no iba a admitir «presiones» en la elaboración del dictamen y que afronta esta última etapa con «mucha tranquilidad». Con el objetivo de ser «serio y riguroso». Espera que el dictamen pueda llegar al Pleno en el presente periodo de sesiones, aunque matizó: «No me cierro a nada».

Los tiempos, en cualquier caso, no son una cuestión menor, teniendo en cuenta que la presidenta de la Junta puede salir señalada del dictamen final. Se mueva a dónde se mueva Ciudadanos, va a tener mucha repercusión mediática y la sombra de unas terceras elecciones no acaba de despejarse. Si hay nueva convocatoria electoral podría ser el 18 de diciembre, una semana antes de lo previsto inicialmente.

La ponencia síntesis difícilmente podría estar lista en un mes, por lo que para que se apruebe en el actual periodo de sesiones, antes de las vacaciones de Navidad, el debate final tendría que producirse en diciembre. A finales de dicho mes, salvo un inesperado adelanto como el de este año, se producirá también el debate final de los Presupuestos. Así que una colisión con la fecha de unas eventuales terceras elecciones es más que evidente.